En el marco del Consejo de Ministros que lideró en la noche de este martes el presidente Gustavo Petro, se conoció que el Gobierno Nacional se comprometió a avanzar en la reactivación económica y social en el Cauca.
Durante el Consejo de Ministros, el Gobierno analizó el despliegue estatal al corregimiento El Plateado, ubicado en Argelia, en Cauca, donde el Ejecutivo y la Fuerza Pública buscan retomar el control de la zona, asediada por las disidencias de las Farc.
En ese sentido, se abordaron propuestas para el desarrollo de territorios afectados por la violencia y el abandono estatal. Entre las medidas discutidas, se destacó la implementación de una política de crédito para los campesinos en corregimientos como El Plateado que garanticen su sustento al margen de los cultivos de uso ilícito.
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Por otro lado, el primer mandatario llamó la atención de los ministerios para identificar dónde están alojados sus datos de cara a recuperar la soberanía digital del país. Por ello, se anunció desde ya la necesidad de crear un centro de datos nacional con sede en Barranquilla.
Frente a El Plateado se propuso un plan de choque inmediato para la construcción de obras públicas esenciales, como vías, un puesto de salud y canchas deportivas, que serían realizadas por la misma comunidad con financiamiento estatal.
Desde el sábado están desplegados en El Plateado hasta 1.400 miembros del Ejército por orden del presidente. La intención es recuperar el territorio que se ha convertido en un bastión de las disidencias de las Farc comandadas por alias Iván Mordisco.
Después del ingreso del Ejército, hasta ese corregimiento del Cañón del Micay llegaron varios ministros y funcionarios del Gobierno. La visita duró un solo día y tenía la intención de llevar la oferta institucional al territorio.
En medio de la intervención de los funcionarios apareció una polémica foto. Gloria Miranda, directora de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito, se tomó una selfie en la que se le ve sonriendo junto a la viceministra Gómez.
Ambas están equipadas con chalecos y cascos antibalas del Ejército mientras interactuaban con la población civil, que no contaban con ningún tipo de protección.
