Atemorizada está la gente de Anorí, Nordeste antioqueño, y preocupadas están las autoridades después de que se descubriera que al interior de una caneca de leche había peligrosos explosivos.
La noticia la dio el gobernador Andrés Julián Rendón a través de su cuenta de X. El mandatario señaló que personas desconocidas entregaron a una empresa de encomiendas una caneca de leche que contenía explosivos.
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Las autoridades expertas en el tema se encontraron cables y un radio encendido. El material fue llevado a una zona apartada donde fue detonado.