Magia, quietud y respeto fueron las tres cualidades que los jurados del Premio Internacional de Periodismo Rey de España destacaron en una imagen que refleja, en una sola toma, y con fuerza, “algo tan desgarrador como la pérdida de un ser querido”.
Se trata de una fotografía que retrató el reportero gráfico de EL COLOMBIANO Carlos Velásquez Piedrahita, que fue publicada por el diario Q’hubo Medellín el 25 de julio de 2020, con el título “El último abrazo” y que en la tarde de este miércoles 9 de junio recibió el galardón en la versión trigésima octava de este premio.
Para Velásquez, el acontecimiento se trata de un orgullo y honor personal, pero también “una forma de poner en alto el nombre del periodismo en Colombia, de demostrar que lo que hacemos es esa labor fundamental de informar”.
Para Martha Ortiz, directora de EL COLOMBIANO, “el premio Rey de España es un reconocimiento como pocos al periodismo. Este galardón otorgado a Carlos Velásquez representa un honor para esta casa editorial que se enfrenta al reto de retratar a veces historias tan difíciles sin perder el sentido del respeto a la persona”.
Rodrigo Morales, director de Q’hubo, señaló que el galardón es también un reconocimiento al trabajo que ha hecho el diario para registrar la realidad de Medellín y del área metropolitana, una realidad “dura muchas veces y que nos duele en lo más profundo de nuestro corazón”.
Retrato de una ciudad
La imagen fue tomada el 24 de julio de 2020 en el barrio La Gabriela en el municipio de Bello. Ese día se halló el cuerpo sin vida de un joven que se encontraba desaparecido y cuando Velásquez llegó a la escena, logró presenciar el dolor de la pérdida de un hermano reflejado en un abrazo dado a quien, sin vida y con solo 16 años, estaba a punto de ser llevado por las autoridades para adelantar el proceso de inspección judicial al cadáver.
Aún así, lo que más le impactó fue que el rostro de quien abrazaba al fallecido tenía “aparente tranquilidad y, a la vez, nostalgia”.
Ganar el reconocimiento con una imagen conmovedora es, para el reportero gráfico, una oportunidad para hablar sobre la impunidad, pues esta “visualizó uno de muchísimos casos que ocurren en el país donde los parientes no tienen respuesta por parte de las autoridades sobre lo que le pasó a un ser querido”, y un llamado de atención para darle importancia a la vida, “a veces subvalorada, sobre todo en nuestra ciudad, donde muchas muertes se han normalizado y vuelto cotidianas”.
Agrega que quienes no ven, o no quieren ver lo que está pasando, se encuentren de frente con esta realidad para que deje de ser una estadística más.
Esta expresión artística inmortaliza en el momento exacto una escena para contar una historia de forma estética y respetuosa, continúa el galardonado, por lo que es un ejercicio meritorio en el que él espera continuar creciendo y trabajando con pasión.