A pesar de presentar resultados financieros positivos al cierre de primer trimestre de este año, los números del Grupo EPM sintieron los efectos de algunas de sus inversiones, entre ellas Afinia y Tigo.
Vale anotar que entre enero y marzo de este año EPM contabilizó ingresos por $10,08 billones, cifra mayor en 11,6% frente a los $9,03 billones reportados a marzo del 2023.
La cuenta de utilidades, por su parte, también creció 55,1%, al subir de $1,11 billones en el primer trimestre del año anterior a $1,72 billones en el mismo periodo de este 2024.
Es así como en el reporte trimestral de EPM se refleja la dinámica de Une EPM Telecomunicaciones (Tigo), sociedad en la que tiene una participación del 50%, la cual contabilizó pérdidas por más de $95.000 millones a marzo.
Por el método de participación aplicado en las cuentas del trimestre, el monto de las inversiones de EPM en Tigo totalizan $1,74 billones y el saldo de pérdidas alcanzó los $66.244 millones.
En su informe a la Superintendencia Financiera, Tigo reportó una disminución de 1,41% en sus ingresos, los cuales pasaron de $1,35 billones entre enero y marzo del año anterior a $1,33 billones en los mismos meses de este 2024.
Este desempeño se originó “en la reducción de la actividad comercial y de ventas en la unidad de negocio de hogares (servicios de televisión, internet y telefonía fija) generada principalmente por la desaceleración del mercado y de la industria en general que se ha visto impactada por variables macroeconómicas como la inflación, tasas de cambio y competencia del mercado con ofertas y tarifas más bajas”, se lee en el texto.
Sin embargo, añadió Tigo, esta menor actividad comercial en ingresos se compensó con reducción en los costos y gastos de operación de la compañía, lo que generó un resultado positivo en Ebitda y superior en este indicador en comparación con el mismo trimestre de 2023.
La empresa aseguró que continúa realizando una gestión operativa y financiera integral que le permite mantener el control de los costos y gastos comerciales; igualmente ejecuta una revisión continua de tarifas con proveedores y terceros para incrementar eficiencias de flujo de caja y de rentabilidad, y también limita los presupuestos de inversión y los orienta únicamente al crecimiento, expansión y/o mantenimiento de la red móvil y fija a lo largo del país para mantener su base de clientes.
Otro saldo rojo
Caribemar de la Costa (Afinia), que presta servicios públicos de distribución y comercialización de energía eléctrica en el norte del país, pertenece 100% a EPM.
La situación financiera de esta empresa es grave, o por lo menos, ese fue el calificativo que usó el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, para referirse al desempeño de esta filial.
Desde 2020, la inversión de la compañía asciende a $2,05 billones, pero lejos de dar un retorno aceptable, la empresa está arrojando pérdidas por el orden de $90.000 millones mensuales.
“Afinia está en una situación financiera que obliga de manera urgente a convocar al Gobierno Nacional para que encontremos soluciones, de no ser así, tendremos una crisis en la filial que afectará la prestación del servicio”, afirmó el alcalde, quien a su vez se desempeña como presidente de la junta directiva de EPM.