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Hoy les traigo un vino que, por su calidad, potencia y estructura tánica, haría palidecer a los más robustos Cabernet Sauvignon de Chile o a los Tannat más agresivos de Uruguay, un vino que el crítico chileno Patricio Tapia no dudó en llamar “los vinos de cemento” por su impresionante carga tánica. Se trata de la italiana uva llamada Sagrantino procedente de la región de Montefalco en Umbría.
Impresiona el dato que hace apenas 30 años no se sabía nada de este vino, se vinificaba solo en versión dulce con sus uvas secadas al sol, era un pequeño tesoro umbro de unos cientos de hectáreas que solo se tomaba en el corazón de Italia, hasta que apareció un viticultor llamado Arnaldo Caprai quien compró la finca Val di Maggio y los terrenos adyacentes, y comenzó a elaborar un vino tinto seco y a revalorizar una uva que hasta entonces era menospreciada o por lo menos ignorada.
La sagrantino entierra sus orígenes en la noche de los tiempos es cultivada sobre las laderas de las colinas de Montefalco en Umbría. Sobre su génesis existen diversas teorías, las más creíbles hablan del famoso historiador y amante del vino Plinio el Viejo (muerto en el año 79, en plena erupción del Vesubio) quien en su “Historia Natural” la cita como la uva local llamada Itriola. La segunda versión habla de un monje franciscano quien la habría traído de alguna zona de Asia Menor. El nombre Sagrantino hace referencia a los Sacramentos, pues la uva era destinada para hacer vino de consagrar.
Montefalco se encuentra sobre colinas con una altura media de entre 250 y 300 metros sobre el nivel del mar y una excelente exposición solar, en los municipios de Bevagna, Cattaneo, Castel Ritaldi y Giano dell’Umbria, todas pertenecen a la provincia de Perusa, en el corazón de Umbría. Existen actualmente unas 167 bodegas productoras de Sagrantino, en un territorio que comprende 285 hectáreas. Allí 62 productores pertenecen al Consorcio, constituido en 1981, que tutela los vinos con denominación de origen de Montefalco. La producción anual es de unos 125.000 litros de Sagrantino seco y 20.000 de “passito” (dulce).
Hoy existen dos tipos distintos de Sagrantino, el “secco” y el “passito”. Al sagrantino seco se le exige una graduación alcohólica mínima de 13º y al pasificado de 14º. La crianza obligatoria para los dos tipos es de 30 meses, de los cuales al menos 12 debe pasarlos el vino en barricas de madera. El seco es muy rico en polifenoles y taninos, con un gran potencial para envejecer. El “passito” nace de un sistema tradicional de pasificación; La uva se recoge al final de la vendimia y se deja pasificar sobre esteras durante meses. Estudios de la Facultad de Agricultura de la Universidad de Milán revelan que la Sagrantino es un patrimonio vinícola de Italia, la conclusión a la que han llegado esta institución es que es la uva más rica en taninos de las conocidas hasta el momento por el hombre.
Vino: Cólpetrone Sagrantino Montefalco
Bodega: Tenute del Cerro
Uva: 100% Sagrantino
Año: 2014
Zona: Montefalco DOCG (Umbría)
País: Italia
Enólogo: Emanuele Nardi
Potencial de Guarda: entre 15-20 años
Temperatura de Servicio: 16ºC
Importador: Trece Grados
Alcohol: 14,5 % AbV
