Durante la reunión de ayer del Banco de la República, la noticia que dejó más ecos no fue la conservación de la tasa de interés en 1,75 % sino la confirmación de que Juan José Echavarría, actual gerente general del emisor, no aspirará a la reelección de su cargo, con lo que el próximo año iniciará con un nuevo dirigente de la entidad.
El gerente se retira, por motivos familiares, dejando una tasa de interés 5,75 puntos porcentuales inferior a la que recibió, puesto que en el inicio de su gestión la tasa de interés se encontró en 7,5 %, la cual fue disminuida hasta el 1,75 % que se decidió en la reunión del lunes 28 de septiembre (ver Gráfico).
Teniendo en cuenta que uno de los objetivos que tiene el Banco de la República es que la inflación mantenga un crecimiento saludable para las finanzas del país, razón por la que año a año se establecen rangos meta sobre este indicador, el emisor destacó que esta se disminuyó desde cerca de 6 %, al inicio de este periodo (2017-2020) a 3,8 % para cierre del año pasado y a 1,97 % con respecto a lo que se vio a cierre de septiembre, a doce meses, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane).
Entre los hitos enlistados por el emisor sobre la estadía de Echavarría se encontró el manejo de la pandemia, pues, este año “se transfirieron al gobierno 7 billones con cargo a las utilidades de 2019, y en 2021 se espera transferir cerca de 6,8 billones”.
El análisis que hace el profesor de la Universidad de Antioquia, Ramón Javier Mesa, es que Echavarría dejó un legado de estabilidad macroeconómica en un contexto que calificó como más difícil que se ha visto desde la década pasada.
La votación para decidir el próximo gerente general estará en manos de los miembros otros seis miembros de la Junta Directiva, la cual está compuesta hoy en día por Arturo Galindo, Gerardo Hernández, Ana Fernanda Maiguashca, Carolina Soto, Roberto Steiner y el Ministro de Hacienda de turno, que en este caso sería Alberto Carrasquilla.