Una de cada cinco cajas de bananos que se exportan desde Urabá es despachada por Banacol, una empresa que genera 5.000 puestos de trabajo en la región que más comercializa esta fruta en Colombia (65,4 millones de cajas en 2019), y donde esta actividad se constituye en el principal renglón de la economía.
Al celebrar 40 años de operaciones la administración de la compañía reconoce que se han sorteado múltiples adversidades como la violencia en la zona agroindustrial causada por la presencia de grupos armados ilegales, los efectos negativos que en ocasiones se derivan de la revaluación del peso frente al dólar, los bajos precios internacionales de la fruta, el impacto climático, el alto precio de los insumos agrícolas o la baja competitividad frente a otros países que producen con menos costos.
A lo anterior se suma el hecho de que en el último año y medio se han debido reforzar las medidas fitosanitarias para contener la llegada de la plaga de los cultivos llamada Fusarium Raza 4 Tropical (Foc R4T) y, este año, lidiar con la covid-19 para evitar el contagio de los trabajadores.
“Estos 40 años de trabajo en la región de Urabá nos han permitido entender la importancia de la sostenibilidad como eje central del desarrollo del negocio y de la comunidad que hace parte importante de la cadena de valor. Es por esto que seguiremos liderando iniciativas de gestión social y ambiental”, anotó Víctor Manuel Henríquez Restrepo, presidente de GreenLand, grupo empresarial al que pertenece Banacol.