Para garantizar el transporte seguro de quienes van a disfrutar los restaurantes y bares de Provenza, están trabajando en la instalación de tres acopios de taxi en esta zona comercial y turística de Medellín. Sin embargo, aún no se ha podido materializar toda la estrategia porque falta instalar las herramientas tecnológicas requeridas y aún se avanza en concertaciones con algunas personas inconformes con su implementación.
Una de las inconformidades surgió luego de que ubicaran el primer acopio propuesto en la calle 8, entre las carreras 35 y 36, un lugar donde habitualmente parquean los feligreses que van a la iglesia del sector, que, al igual que algunos comerciantes, se quejaron porque los estaban dejando sin un lugar donde estacionar.
Paul Byron Carter, vicepresidente de la Corporación Provenza, manifestó que “pintaron el piso, hicieron su señalización, pero no hicieron la correcta socialización. Ante esto, la parroquia y los residentes fueron los primeros que alzaron la mano en decir que no estaban de acuerdo porque les quitaron todas las celdas de parqueo para su asistencia a las misas y tampoco a los comerciantes nos convenció esa solución porque estaba en todo el corazón de Provenza”.
Ante las reiterativas quejas de la comunidad de este sector, desde la Secretaría de Movilidad de Medellín se iniciaron las conversaciones para establecer la ubicación de los acopios requeridos.
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“Llegamos a acuerdos de tener activos tres puntos de acopio que quedarían en la calle 7 entre carreras 35 y 34, en la calle 8 entre las carreras 34 y 35 y el que iba sobre la carrera 35 entre las calles 10 y 10A. El tramo que queda entre la 35 y la 36 habíamos definido en esas reuniones que volvía a ser parqueadero regulado”, explicó el líder gremial.
Quien sí mostró su conformidad con los acopios y Zonas de Estacionamiento Regulado (ZER) del sector fue el secretario de Movilidad de Medellín, Mateo González, quien destacó que a falta de un decreto para dejar en firme estos nuevos puntos para la recolección de pasajeros, la principal satisfacción era que se implementaron después de sostener diálogos con las comunidades que se verían beneficiadas.
La idea de ampliar estos acopios es que los visitantes a esta zona lo hagan en transporte público para evitar colapsar las calles y, de paso, que no haya conductores en las vías bajo los efectos del licor.
Esta estrategia funcionará con un espacio que cuente con despachadores pertenecientes a empresas de taxis, tal como ya sucede en centros comerciales y hospitales, con el fin de generar un espacio regulado y organizado, que le pueda garantizar la prestación del servicio a los usuarios, evitando algunas usuras como el cobro de viajes mínimos por encima de lo marcado por el taxímetro, dependiendo de quien lo tome.
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Para ello ya se ha conversado con algunas empresas de taxis para que se tomen los tres espacios predeterminados y con ello tener todo el control de la prestación del servicio.
Fabián Quintero, presidente de Tax Individual, expresó sobre esta estrategia que “se está realizando un trabajo de ciudad, con las secretarías de Movilidad, Turismo e Inclusión Social del Distrito, los comerciantes del sector y las empresas de taxi, definiendo todo el equipamiento y amueblamiento que se requiere para la implementación y puesta en marcha del acopio”.
Falta la implementación tecnológica