En Cuba se realizó este domingo 25 de septiembre un referendo para aprobar o rechazar el Código de las Familias, un paquete legal que incluye el matrimonio igualitario y la gestación subrogada. El Gobierno presidido por Miguel Díaz-Canel hizo campaña a favor de las medidas mientras la oposición se dividió al considerar algunos puntos muy polémicos, en particular el de la sustitución de “patria potestad” por una “responsabilidad parental”. A juicio de los activistas esta cláusula serviría para controlar a los disidentes pues el Estado podría quitarles los hijos “si observa una conducta viciosa, corruptora o delictiva”.
A pesar de las campañas estatales, según indicios de la prensa, la participación electoral habría sido muy baja. El Consejo Electoral Nacional (CEN), que no difundirá resultados parciales hasta el lunes, informó de que hasta las cinco de la tarde habían participado 5.806.078 personas, de un censo inicial de 8.425.147, lo que implica una participación del 68,91 %.
En comparación, la participación en el referendo constitucional de 2019 -el último ejercicio equivalente- fue del 84,4 %, y en el de 1976 alcanzó el 98 %, según datos oficiales. Una de las causas de la poca participación sería el de la falta de confianza en las instituciones electorales. Además, según registraron medios independientes de la isla, los cubanos están más preocupados por el paso del huracán Ian.