El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, afirmó que tiene un nuevo sistema de misiles hipersónicos, los cuales fueron ensayados el 6 de enero en un lanzamiento de prueba.
Según el gobernante supremo del país asiático, estas armas servirán para disuadir a sus “rivales” del Pacífico.
“El sistema de misiles hipersónicos contendrá de forma fiable a cualquiera de nuestros rivales en la región del Pacífico que pueda afectar a la seguridad de nuestro Estado”, declaró Kim, quien supervisó el lanzamiento y aclaró que esto hace parte de un plan de autodefensa y no de acción ofensiva.
El lanzamiento coincidió con la vista que hizo ese mismo día el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, a Corea del Sur, un aliado estratégico del gobierno de Joe Biden en la zona.
El líder norcoreano aseguró en un comunicado que el misil recorrió una trayectoria de 1.500 kilómetros y superó 12 veces la velocidad del sonido antes de aterrizar en el agua.
A pesar de que Kim aseguró que estos misiles no hacen parte de una estrategia ofensiva, sí afirmó que este tipo de armas “no pueden ser ignoradas” y que podrían “asestar un serio golpe militar a un rival rompiendo eficazmente cualquier barrera defensiva densa”.
Por esto, en su visita a Corea del Sur, Blinken rechazó el lanzamiento de prueba e insistió en la importancia de una alianza de ambos países con Japón.