El actual jugador del Real Madrid reclama a su antiguo club, pagos de salarios y primas de los últimos tres meses de contrato allí.
La estrella del fútbol Kylian Mbappé consiguió un embargo con carácter “cautelar” de 55 millones de euros (61,28 millones de dólares) al París Saint-Germain en concepto de salarios y primas impagadas que reclama a su antiguo club, anunciaron este jueves sus abogados.
Mbappé, que dejó el PSG en 2024, solicita el pago de los últimos tres meses de salario de su contrato de trabajo, así como las primas de fichaje y de ética.
El miércoles, el juez de ejecución del tribunal judicial de París autorizó que se llevara a cabo un embargo precautorio de las cuentas del club a petición del jugador, quien también presentó una denuncia contra X (antes Twitter) por “injurias públicas”.
“Acoso moral”
Sus abogados Delphine Verheyden, Frédérique Casserau, Thomas Clay y Pierre-Olivier Sur anunciaron que el actual delantero del Real Madrid acudirá al tribunal laboral y que se unirá a una denuncia más global del sindicato francés de jugadores (UNFP) contra los clubes profesionales “por acoso moral”.
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La UNFP presentó una denuncia hace un año por acoso relacionado con “la práctica del ‘loft’”, es decir, la exclusión de jugadores, de la cual Mbappé considera haber sido víctima en el PSG.
El PSG “irá al tribunal laboral sin problema”, respondió a la AFP una fuente de la dirección del club, afirmando que Mbappé “no va a ganar”. El conflicto entre el futbolista y el PSG nace por un acuerdo alcanzado en agosto de 2023 entre ambas partes.
Mbappé fue apartado del primer equipo parisino por haber rechazado renovar con el club. Esa renovación hubiera permitido al PSG percibir dinero por un eventual traspaso, mientras que Mbappé recaló a costo cero en el Real Madrid en calidad de jugador libre al final de la temporada 2023-2024.
En virtud de aquel acuerdo, el jugador se comprometía a renunciar a 55 millones de euros en diversas primas si se iba libre a final de la campaña.
Primer examen en mayo
Pero la validez de ese acuerdo, que el propio jugador había evocado públicamente ante la prensa en enero, es negada por el equipo legal de la estrella.
El jugador reclama el pago de 55 millones de euros que corresponden al último tercio de una prima por firmar (36 millones de euros brutos), las tres últimas mensualidades, así como una prima de ética de esos tres meses.
En septiembre, la comisión jurídica de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y luego en octubre la comisión de apelación mixta paritaria de la LFP habían instado al PSG a pagar estas sumas. El club se negó a pagar y llevó a la LFP al tribunal judicial de París para que mediara en estas dos primeras decisiones.
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Debido a esta demanda, la comisión de disciplina de la LFP y luego la comisión superior de apelación de la Federación Francesa de Fútbol (FFF) se declararon incompetentes para resolver el recurso, primero en diciembre y luego en febrero.
Una audiencia de orientación en el tribunal judicial de París, es decir, un primer examen del caso, fue fijado el 26 de mayo, antes de la celebración de una primera audiencia sobre el fondo del expediente que debe tener lugar dentro de varios meses.
