Desde los años ochenta empezó esa búsqueda por su lugar dentro de la música, entre esfuerzos, pruebas, errores, y nuevos inicios, hasta que hace un poco más de tres décadas, Carlos Vives encontraría una fórmula que le permitió dedicarse de lleno a la música y armar una verdadera revolución musical que ha cautivado a buena parte del mundo.
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Por este motivo, la Academia de las Artes y Ciencias de la Grabación Latina lo nombró Personaje del Año en la edición 25 de los premios Grammy Latino que se entregarán la próxima semana en la ciudad de Miami.
Este sábado a las diez de la noche, el canal TNT y la plataforma Max estrenarán el especial Carlos Vives: el amor de mi tierra, que se adentrará en los momentos clave de su extensa trayectoria, revelando un lado personal y cercano del icónico artista colombiano, cuyo legado ha dejado una huella profunda en la música y la cultura latinoamericana.
El artista samario será reconocido como ‘Persona del año’ este miércoles 13 de noviembre, en el Miami Beach Convention Center en Miami, un día antes de la entrega oficial de los premios Latin Grammy.
El especial contará con emotivos testimonios de colegas y amigos de Vives, como Camilo, Juanes, Luis Fonsi, Gusi y Goyo, quienes compartirán anécdotas y la influencia de este cantautor a lo largo de sus carreras.
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La columna vertebral del especial se centra en una entrevista con el propio Carlos Vives, quien comienza por lo que vivirá la próxima semana en Miami, con su homenaje en los Latin Grammy.
“Debo empezar a agradecer a los colombianos porque ellos fueron los primeros en llevar mi música por el mundo. Cuando no había una industria global, ellos en el equipaje llevaban mis discos y me promocionaron con sus amigos. Es por eso que también me tienen dando vueltas por todo el mundo”, comentó Carlos Vives en el especial.
En sus palabras
Lo podía dejar de lado la fuente de la cual alimentó su proyecto, con la música tradicional de la región Caribe colombiana, como el vallenato y la cumbia.
”Representamos a los músicos tradicionales que nos dejaron una herencia, que nosotros hemos usado para hacer cosas nuevas y que las nuevas generaciones siguen usando, por lo que el reconocimiento que me hacen a mí también es un reconocimiento a un territorio muy especial donde hay gente muy especial y que se ha hecho música muy especial”.
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Vives también recordó que estuvo presente en la primera edición de los Premios Latín Grammy, de la cual fue el más nominado, situación que lo tomó por sorpresa. “Todos los artistas que estaban cuando yo llegué, como Julio Iglesia, Celia Cruz, Tito Puente, una generación con la que yo estuve nominado y ya no están. Además, que sea Miami y en su 25 edición es muy especial, porque Miami es una comunidad muy especial que nos enseñó mucho y que le hemos dado lo mejor de nosotros. Una oportunidad para agradecerle a todos”.
Siendo un especial que saldrá en toda América Latina, el cantautor samario recordó que su profesión como publicista le fue bastante útil para proyectar lo colombiano, más en las décadas de los ochenta y noventa donde los artistas tenían que competir contra la imagen de un país en medio de la barbarie. “Esas cosas malas eran parte de nuestra tragedia, pero nosotros estábamos para mostrar lo otro, la cultura, el arte, la tradición y a nuestros poetas”, continuó.
Sus búsquedas musicales, radicado en Bogotá, lo llevaron por el rock, en especial el rock argentino que entraba con fuerza en Colombia, pero fue en Bogotá que se daría cuenta que las claves estarían en su tierra natal. “Muchas vueltas di para encontrar mi identidad en todo esto, y al final, regresé a mi infancia... Que bueno que fuí rebelde. Entendí que esa herencia podía ir hacia adelante para poder hacer cosas nuevas. No bastaba grabar aquellas canciones viejas, sino que había que hacer cosas nuevas inspiradas en esa herencia”.
En el especial del canal TNT y la plataforma de streaming Max, confiesa que no le tocaron los Beatles, “en mi casa no me enseñaron ni inglés, pero sí me tocó todo el rock argentino que fue toda una suerte... No hay nada más rebelde que el rock de mi pueblo, porque cuando uno hablaba de rock todos los ‘dueños del rock’ te decían: ¡Eso no es rock! Y a la gente le molestaba que yo decía que hacía rock de mi pueblo, porque era música de aquí y no era copiada de otros lados”.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando se refirió, entre lágrimas, a Egidio Cuadrado, el acordeonista, el Rey Vallenato, que por más de treinta años lo acompañó liderando al grupo La Provincia.
”Yo quiero decirle a él que gracias por aguantar todas mis locuras. Gracias por creer en esos locos rockeros. Yo también quise que lo respetaran mucho porque era de los reyes vallenatos que habían tenido ciertas cosas despectivas con él, y eso hizo que yo lo abrazara más”.
Y agregó: “Quería tomar el camino, no el que me mostraba la fama, sino el de ser auténtico, con una propuesta con una forma diferente de proyectar nuestra tropicalidad, que era lo que estaba descubriendo en el movimiento de las bandas bogotanas donde se mezclaban músicos cumbieros con bluseros, viendo que se podían aplicar patrones de la música tradicional colombiana”.
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También se refirió a su fundación y su trabajo en distintas regiones del Caribe: “Hoy trabajo para la gente, para esos territorios y esa geografía. Por eso tenemos una fundación, y coincide con los lugares por los cuales mi padre me llevaba, un territorio donde nació la cumbia, donde nació el vallenato, trabajando con las comunidades anfibias”.
Y dijo: “Para proteger el folclor como el vallenato, no se protege con los discos de Carlos Vives o Silvestre Dangond, se protege cuidando el medio donde nacieron, porque si para el campesino hay violencia, para el río contaminación, no existirá el folclor, hay que cuidar el pueblo, hay que cuidar la tierra. Si el río se muere, la cumbia se muere”.
