El Partido Conservador ya se declaró como bancada del gobierno de Gustavo Petro, con lo que entra a engrosar la lista de los grupos afines al mandatario entre los que ya están el Polo, la Unión Patriótica y la Colombia Humana.
La determinación se tomó después de la reunión del Directorio Nacional con los congresistas, que son una de la fuerzas más robustas del Congreso junto al Pacto Histórico y los liberales. Es probable que estos últimos también aterricen en el equipo de Petro.
“El Partido Conservador no abandonará con esta decisión, la defensa de sus ‘líneas azules’: propiedad privada, la libre empresa, la familia, el Estado social de Derecho, la Fuerza Pública, la libertad de expresión y el modelo económico que ha mantenido históricamente”, prometió la colectividad a sus seguidores más godos.
Ese grupo siempre fue una fuerza de derecha. En años anteriores respaldó a los expresidentes Andrés Pastrana, Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos e Iván Duque y ahora esta determinación marca un viraje a la izquierda en medio de los reparos de algunos de sus militantes.
Uno de ellos es el exprecandidato a la Presidencia, David Bárguil, quien hizo público su malestar con el aterrizaje de su partido en las filas petristas y ya había reclamado que la colectividad se declarara en independencia.
“La corrupta alianza con Petro de los parlamentarios conservadores desprecia a la militancia del Partido e insulta sus principios”, comentó el exmandatario Pastrana.
Si bien varias voces conservadoras pedían que el partido no se aliara con la izquierda, el senador antioqueño y presidente del directorio, Carlos Andrés Trujillo, movió las bases de este para que este se alineara con el gobierno.
Gracias a Trujillo, a las maquinarias del Partido de la U y probablemente las del Liberal Gustavo Petro tendría una amplia gobernabilidad en el Congreso.