Si en su hogar hubo niños menores de dos años entre 2001 y 2012 y compró pañales de marcas como Winny (Tecnoquímicas), Pequeñín (Productos Familia) o Huggies (Kimberly-Clark), seguramente pagó de más, lo que afectó en mayor medida a familias de ingresos bajos.
Y esto por cuenta del acuerdo ilegal de precios que mantuvieron las tres compañías, dueñas del 85 % del mercado nacional, y que ayer la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) sancionó con la multa máxima posible para cada una de ellas de 68.945 millones de pesos (100 mil salarios mínimos legales).
El superintendente Pablo Felipe Robledo del Castillo, las tres compañías incurrieron “en una conducta concertada, continuada y coordinada para fijar artificialmente el precio de los pañales desechables para bebé en el mercado colombiano”.
La decisión final de Robledo, cobijó a los mismos 16 altos directivos y exdirectivos que sugirió el informe motivado del Superintendente Delegado para la Protección de la Competencia, Jorge Enrique Sánchez, conocido el 16 de mayo pasado.
Según Robledo, estas personas merecen la sanción “por haber colaborado, facilitado, autorizado, ejecutado o tolerado la conducta violatoria del régimen de la libre competencia económica”.
Al final, fueron exonerados 28 de los 44 altos directivos y exempleados de las tres compañías a quienes se elevaron pliegos de cargos en agosto de 2014 (ver recuadros).
Llama la atención que la multa incluye a quienes fueron los presidentes o gerentes de las tres sancionadas durante el periodo investigado por la SIC. Al final, las multas que deben pagar los 16 son 2.071 millones de pesos. Con todo, la sanción suma 208.907,6 millones de pesos, sin embargo, a las cuentas del Ministerio de Hacienda solo ingresarán 105.489,4 millones de pesos, es decir 50,5 % de la medida que anunció la SIC, y a la que solo procede el recurso de reposición por parte de los señalados.