Ricardo Antonio Arroyave Cardona, uno de los primeros conductores de Uber que tuvo Medellín, murió apuñalado dentro de un parqueadero del sector de Bomboná, en el centro de Medellín, en medio de un altercado con varias personas que se originó porque le habían cambiado los tapetes de su carro mientras se lo estaban lavando.
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Los hechos se registraron en el establecimiento ubicado en la calle 47 con la carrera 42, de acuerdo con las autoridades, cuando este hombre, de 48 años, empezó a reclamar airadamente por lo sucedido con su automotor, mientras se encontraba en alto estado de alicoramiento.
En medio de la situación, además de la persona que estaba lavando el vehículo y quien en un principio intentó calmarlo ofreciéndole soluciones, hicieron presencia otros sujetos, quienes agravaron la situación.
Según los testigos, Arroyave Cardona sacó un arma traumática en medio de sus reclamos, y uno de los individuos que intervino en el inconveniente tomó un cuchillo y le propinó una puñalada en el pecho, dejándolo gravemente herido.
Al ver si situación, lo trasladaron de urgencia a Hospital San Vicente Fundación, de Medellín, donde no pudieron salvarle la vida por gravedad del ataque, debido a que la puñalada afectó uno de sus pulmones.
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El señalado agresor de este conductor de Uber intentó escapar en un taxi, pero las cámaras de seguridad identificaron la placa del vehículo y las autoridades hicieron una persecución con las cámaras LPR.
Cuando este automotor transitaba por el barrio Pilarica, comuna 7 (Robledo), unidades de la Policía Metropolitana interceptaron el vehículo de servicio público y allí capturaron a Carlos Andrés Vergara Alzate, a quien le encontraron un cuchillo ensangrentado y se investiga si sería con el que ocurrió el ataque de Arroyave Cardona.
A Vergara Alzate se le iniciará un proceso por el delito de homicidio agravado, aunque trascendió en su primera versión que tomó la decisión de atacarlo a ver que el fallecido había desenfundado su arma traumática.
Allegados a Arroyave Cardona señalaron que él empezó a trabajar como conductor de Uber, prácticamente, desde que la plataforma desembarcó en Medellín el 24 de diciembre de 2014.
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“En un principio era muy solo todo y muy complejo para trabajar con la aplicación, pero él le trabajó duro y le dio consejos a muchos de los que nos metimos después para que nos fuera bien”, relató uno de sus conocidos, quien también trabaja en esta aplicación.
Destacó que el fallecido era una persona muy meticulosa con el mantenimiento de su vehículo, tanto que, según el allegado, “siempre que se le miraba el motor o el interior era impecable”.
Arroyave Cardona era casado y padre de una hija. Además, había adquirido el vehículo implicado en la polémica recientemente y era uno de los conductores más reputados de la aplicación, no solo por la prestación de su servicio sino porque era bilingüe.
Pese a este crimen, la comuna 10 (La Candelaria) presenta una reducción en las cifras de homicidios, ya que el año pasado se contabilizaban 19 casos, mientras que para este año se registran 15.
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Lo que sí ha presentado un alza son las muertes por intolerancia, ya que este año se tienen registrados 23 casos, mientras que el año pasado iban 15, según el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc).
