“Ciclista en proceso”. Así escribió este viernes Egan Bernal en sus redes sociales con una imagen en una piscina, en la que deja ver una cicatriz que empieza en la parte de atrás del cuello y recorre gran parte de la espalda.
El corredor, que en enero pasado se rompió 20 huesos tras accidentarse mientras entrenaba, ha venido mostrando el paso a paso del proceso de su recuperación.
Entre las lesiones que sufrió, el campeón del Tour de Francia-2019 tuvo una complicación a la altura de las vértebras T5-T6.
Luego de las cirugías practicadas, Bernal ha compartido sus diferentes actividades de su rehabilitación. De hecho, para llenarse de energía, bromea con sus publicaciones y sus seguidores no dudan en interactuar con él.
Esta semana, el corredor cundinamarqués lanzó la siguiente pregunta: “Si yo fuera un carro, ¿vendría siendo un siniestro o un segundazo casi nuevo?”. De inmediato, múltiples respuestas no tardaron en llegar.
“Mi llave, después de ver el mamonazo que te diste contra el mataburros trasero de ese bus y estar como estás, debes ser un dobletroque de última generación pero con latas de los 50’s”, le escribió @jotaareyes; mientras que el usuario @carloscardenakk prosiguió: “Monstro, serías un transformer indestructible, Optimus Arley Prime Bernal”.
Dos días después, el pedalista que pertenece a la escuadra británica Ineos, se mostró divertido al señalar que, debido a los 57 kilos que pesa actualmente, estaba casi que listo para competir en el Tour de Francia.
“La ironía de la vida, vine a alcanzar mi peso soñado, lesionado –57 kilos–. Prácticamente ya estoy listo para ir al Tour”.
Sorprende a todos
Los avances de su recuperación, así como la actitud positiva que refleja el corredor pese a los obstáculos que afronta, causan admiración y son motivo de motivación para quienes lo rodean.
Así lo reconoce su tía Gloria Bernal, que este viernes habló con EL COLOMBIANO. La familiar comenta que su sobrino “está hecho de hierro”.
“Todos los días nos sorprende con sus alcances, con sus ganas de salir adelante más allá de las dificultades que se le presentan. No sabemos ni entendemos por qué ese muchacho ha evolucionado tan pronto, luego del grave accidente que vivió”, indica Gloria, quien labora en cultivos de flores en Zipaquirá, municipio cundinamarqués donde creció el ciclista.
La tía de Egan recuerda que desde que tenía dos años, el pedalista daba señales de fortaleza física y amor por el deporte. “A esa edad le regalaron un triciclo, y ese muchachito, pese a las caídas y golpes que se daba, lloraba pero para que lo dejaran seguir montando, era impresionante”.
Dice que en días recientes, su hermano Germán, papá de Egan, les comunicó que el vencedor del Giro de Italia-2021 le había expresado un mensaje que tocó su corazón: “Indicó que había vuelto a nacer, y que todos los minutos que le regalara Dios se los iba a disfrutar. Lo que viene haciendo en sus redes sociales es la clara muestra de ello. No se esconde, quiere ser fuente de inspiración para los demás”.
Gloria añade que para los seres que los rodean, Egan es un ejemplo a seguir.
“Muchas veces uno se doblega por situaciones que no valen la pena. Y en medio de esas dificultades recordamos lo que le sucedió a Egan. Si él pudo volver a caminar tras el accidente, entonces uno también puede encontrar soluciones en medio de las adversidades que afronta, en sí es un ejemplo de superación. Gracias a la voluntad de Dios y de la Virgen, así como a las manos maravillosas de los médicos, estamos disfrutando de Egan. Tenerlo con vida es el mayor triunfo”, relata Gloria, orgullosa de su sobrino
25
años tiene Egan Bernal, que llegó al ciclismo de ruta en 2016.
19
triunfos profesionales acumula Bernal, el último fue el Giro de Italia-2021.
