Más de cuatro décadas de trabajo tuvieron que pasar para que Aerosmith fuera incluida en el Salón de la Fama del Rock, pero es algo que nunca les preocupó a Steven Tyler y su corte, quienes preparan todo para su tercera visita a Colombia.
En dos ocasiones, y como ocurrirá por tercera vez el 29 de septiembre, se han presentado en el Parque Simón Bolívar de Bogotá, en medio de las especulaciones sobre el fin de la banda también llamada ‘Los chicos malos de Boston’, así como los quebrantos de salud de algunos de sus integrantes que superan los 65 años y que buena parte de su vida ha estado marcada por los característicos excesos de los ‘rock stars’ de antaño.
Colprensa dialogó con Tom Hamilton, bajista y uno de los fundadores de Aerosmith, quien luego de batallar contra un cáncer, detectado hace algunos años, está preparado para volver a visitar Colombia.
Parte médico
¿Cómo sigue el estado de salud de Joe Perry, quien sufrió un desmayo hace algunos días?
Afortunadamente no ha sido nada grave, fue un poco de agotamiento que sólo necesita de descanso para continuar con la gira de conciertos que pronto nos llevará a América Latina.
Lea aquí: Guitarrista de Aerosmith se desmayó en pleno concierto
Tom también tuvo algunos quebrantos de salud hace poco, ¿cómo ha seguido el tratamiento contra el cáncer?
Me siento muy bien. No puedo negar que hay momentos muy difíciles, el luchar contra el cáncer no es nada sencillo. Ha sido una terrible experiencia el enfrentar cara a cara el cáncer, y más cuando tienes una carrera tan exigente como el ser músico.
No me puedo quejar igual, he recibido la mejor atención médica, pero en especial, el apoyo de mis amigos, mis colegas y fanáticos de todo el mundo, y en ese tipo de experiencias, todo suma.
Se ha dicho que esta gira sería la despedida de la agrupación de los escenarios. ¿Qué tan cierto es eso?
En realidad no sabemos qué nos deparará el futuro. Cuando comenzamos no pensamos que nos llevaría toda una vida mantener la banda, en que llegaríamos hasta la edad que tenemos, haciendo música y girando por el mundo. Se ha dicho mucho, pero creo que hoy tenemos más claro que se vive un día a la vez, un concierto a la vez, y luego ya veremos.
Ya hemos estado por Europa, Norteamérica, hemos vuelto al Japón y ahora nos preparamos para América Latina. De ahí en adelante, en realidad no lo sabemos.
¿En algún momento de estos años pensaron en el retiro?
Sí lo hemos pensado, en varias ocasiones, pero es imposible abandonarla (la banda) como si fuera un trabajo cualquiera. Son muchos recuerdos, muchas anécdotas y alegrías vividas con la banda.
Aerosmith es tan grande que es difícil hacer otra cosa o pensar en hacer otra cosa después de la banda.
¿Cree que un rock star o artista se jubila?
Es divertido pensar en eso (risas). Si estás en una banda con la fama y el éxito de Aerosmith, es muy difícil pensar en el retiro, porque tienes muchos fans y amas lo que haces. Todo eso hace que no dejen ir a la banda.
Tiempo al tiempo
¿Cuál es la clave para mantener la banda unida por cuatro décadas?
Incluso desde los primeros años los problemas no han faltado. Hemos estado alejados por dos o tres años, y muchos podrían pensar que eso le haría daño a la banda, pero creo que esos espacios han sido claves para reencontrarnos, no saturarnos los unos a los otros, y llegar con ideas frescas para continuar este camino.
Algunos artistas suelen tener proyectos alternos, ¿qué actividades musicales realiza más allá de Aerosmith?
Hay muchas cosas que hago en mi estudio, cosas que suelo explorar con la guitarra o con el bajo, que no suelo mostrar pero que creo que al final terminan siendo experimentos que benefician el propio sonido de Aerosmith.
¿Qué es lo más difícil de ser un rock star?
Sin duda evitar a los fotógrafos que están ocultos esperando que hagas algo escandaloso o cosas de esas. Me encanta la posibilidad de poder viajar por el mundo con la música, pero te agota; entre la música, las fiestas y muchas responsabilidades incluidas en la banda.
Esta será la tercera visita a Colombia. ¿Qué recuerdos tiene de esos dos primeros encuentros con el público de este país?
Recuerdo mucho a Bogotá, me sorprendió su belleza. Estuve a las afueras y me sorprendió la belleza natural de la zona, me pareció bella la arquitectura de Bogotá. Además, me encontraba con gente muy amable que siempre me ofrecía comida (risas), eso me impactó y me encantó.
Ha participado en la composición de varias canciones de la banda, ¿sigue componiendo?
Sí, a veces escribo canciones, en especial cuando estoy deprimido, algo frustrado. Me gusta escribir canciones cuando me encuentro algo melancólico y quizás acompañado de una buena botella de licor, aunque he dejado un poco la bebida.
Tras décadas de éxito.... ¿difícil pensar en algo que les faltó por hacer?
Me encantaría que las giras no tuvieran un agenda tan apretada, para así, poderme quedar más tiempo en lugares que me hubiera encantado conocer más y disfrutar.
También poder compartir con los fans, más allá de las fiestas, poder hablar de manera relajada y tranquila. Quizás más adelante lo pueda hacer.
En Estados Unidos ha vuelto el debate sobre el tema del racismo, y en estos momentos se recuerda lo que hizo Aerosmith y Rum-DCM en los años ochenta. ¿Cómo recuerda lo que significó esa unión para la música entre el rock y el hip hop?
Creo que para la banda logró que nos acercáramos a otro tipo de público, pero además, permitió que el rock se encontrara con el hip hop y así darnos cuenta de que teníamos más cosas en común que diferencias.
El debate del racismo en Estados Unidos sigue siendo muy complicado, pero siempre se deben respetar los derechos humanos sin distinción de raza. Ese tipo de encuentros musicales pueden ayudar.