Medellín fue la primera ciudad del país que popularizó el reguetón. La primera canción del género que sonó en emisoras en Colombia fue El latigazo de Daddy Yankee, en 2001 en la emisora Rumba Stereo de RCN Radio. Que Medellín pegue un género y lo expanda en Colombia no es nuevo: pasó con otro que justo celebra 35 años del fenómeno: el rock en español.
La historia
1987, en un año sin internet, sin correo electrónico ni redes sociales era la radio la llamada a mostrar esas canciones que sonaban, incluso al otro lado del continente. Ese año nació un programa de radio en la ciudad llamado Radio Pirata en Super Stéreo .9, emisora juvenil que empezó a sonar canciones de agrupaciones como Alaska y Dinarama, Toreros Muertos, Hombres G o El último de la fila.
Sonaban discos que trajo Emilio Sus, un melómano paisa que llegaba de España con toda la movida musical madrileña, pero además los acetatos que fue recolectando un hombre de radio de la época, Carlos Alberto Acosta. “Como aquí en Medellín no había emisoras que pusieran esas canciones y a la vez era la ciudad, discograficamente hablando, más importante del país (entre un 80 y un 90 % del mercado eran compañias localizadas en Medellín: Fuentes, Codiscos, Sonolux, FM, Discos Victoria) los discos del género se quedaban en las oficinas y cuando yo iba a ver música nueva me los regalaban. Empecé a hacer una colección muy interesante de artistas de España y Argentina”.
Pero antes de sonar en la radio, Carlos Alberto, llevó los discos a un bar en Envigado llamado New York, New York, que en esa época tan convulsa de la Medellín de los 80 cerró. Luego nació otro, New Order, por el barrio Carlos E. Restrepo. Allí la gente las tarareaba. “De la calle pasaron a la radio y luego explotó el boom”, dice Acosta.
¿Por qué se pegó a niveles nacionales? Para Jairo Álvarez, quien también trabajó con Carlos Alberto en Super Stéreo, este fenómeno no fue premeditado y se sumaron tantas variables que es imposible responder de manera contundente con una sola, “creo que en Medellín somos muy inquietos en todos los frentes y en el arte se da muchísimo”.
Carlos Alberto considera que Medellín es una ciudad muy poderosa en todos los frentes, “Medellín tiene el poder de hacer cosas hermosas y maravillosas y otras terribles y desafortunadas, no es una ciudad de términos medios, esos extremos generan un gran movimiento, no es una ciudad tranquila, lenta y si a eso le añadimos que el rock siempre ha estado asociado al beat de la máquina y que esta es una ciudad industrial pues encontramos similitudes”.
Joaquín Pérez, también hombre de radio, considera que Medellín es una de las ciudades de más trayectoria radial y las emisoras en ese momento eran arriesgadas, “Carlos Alberto tomó decisiones por pasión y gusto, descubrió una música que creyó que funcionaba y la prograbama, eso pasó con el rock en español y eso pasó luego con el Gurú del Sabor y el reguetón, ambos querían innovar, fueron arriesgados. Además la radio antioqueña ha tenido gente con mucho criterio, conocedora y visionaria”.
Para todos los entrevistados aquí en Medellín cuando la gente dice “vamos a hacerlo, lo hace”, cuando va a innovar, innova. Y los géneros musicales han encontrado apasionados como ellos que buscan compartir esa pasión y hasta crear una familia.
Por eso la familia del rock en español, esa que hace 35 años generó una locura en la radio con canciones irreverentes y únicas se va a volver a reunir para festejar (ver más abajo), para hacer memoria y recordar esos éxitos que aún escuchan con gusto.
Amigos de bares y radio que han hecho parte de la historia musical de la ciudad, esa historia que hoy se sigue escribiendo.