En los últimos días de la alcaldía de Daniel Quintero la Secretaría de Cultura Ciudadana pasó a las primeras paginas de los diarios nacionales por el escándalo que protagonizó al no pagarle los honorarios a los cineastas y a los gestores culturales que trabajaron en el Festival Miradas. No fue el último lío protagonizado por esta dependencia, que fue liderada durante tres años por el director de teatro Álvaro Narváez Díaz.
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EL COLOMBIANO se enteró que las finanzas del actual grupo al frente de esta oficina están en estado crítico. Según confirmaron de la propia secretaría, los recursos disponibles solo permiten mantener activos los programas culturales de la ciudad hasta agosto de 2024. “Esto es especialmente preocupante dado que no hay fondos asignados para eventos emblemáticos de la ciudad, como la Feria de las Flores, Altavoz y la Fiesta del Libro“, informaron los funcionarios de la secretaría.
En los cálculos de la nueva administración municipal, el déficit de la secretaría de cultura ciudadana llega a la suma de $83.912.900.000. “El déficit de que enfrentamos en la Secretaría de Cultura Ciudadana de Medellín se debe a la falta de previsión de la Administración Municipal 2019-2023, que no dejó suficientes recursos para cubrir las necesidades de la dependencia este año”, le dijeron a EL COLOMBIANO los responsables de administrar los recursos públicos destinados a la inversión cultural y a la promoción de las artes.
Dicha coyuntura marca un enorme contraste con la tradicional generosidad de los presupuestos distritales concedidos a la cultura y al arte. Durante los primeros años del nuevo milenio los recursos que manejaba la secretaría de cultura de Medellín fueron superiores al presupuesto del Ministerio de Cultura. Sin embargo, para muchos conocedores del tema, esa tendencia se rompió en los cuatro años de la alcaldía de Daniel Quintero.
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Las cifras del déficit son sorprendentes. En un documento que la secretaría actual le compartió a los concejales de Medellín se indica, por ejemplo, que al presupuesto de los eventos de ciudad (Feria de Flores, Altavoz Fiesta de Libro) le faltan $20.850.000.000. Por su parte, el de la Convocatoria de Estímulos tiene un hueco de $12.300.000.000. Este último dato preocupa a los expertos por el hecho que la plata de las convocatorias de estímulos es la que alienta la producción del arte local y los proyectos comunitarios de creación de públicos. De esta crisis ni se salvo la joya de la corona de la cultura de Medellín: el sistema de bibliotecas públicas de la ciudad. Este proyecto, que ha recibido varios premios internacionales, tiene un saldo rojo de $25.286.500.000.
“En la Secretaría de Cultura Ciudadana, estamos trabajando arduamente para buscar y gestionar los recursos faltantes. Nuestro objetivo es cumplir con la ciudadanía, desarrollar la agenda cultural y ejecutar nuevas propuestas que enriquezcan la cultura en Medellín”, le dijeron a EL COLOMBIANO las actuales directivas de esa dependencia.
