En el estreno de Los reyes del mundo –la película de Laura Mora seleccionada para representar a Colombia en los premios Óscar y ganadora de la Concha de Oro del Festival de San Sebastián– el público que asistió al teatro del Mamm pudo ver en la pantalla grande la historia de cinco jóvenes desposeídos que luchan contra el mundo y contra ellos mismos. En efecto, los destinos de Ra, Culebro, Sere, Winny y Nano reflejan los de miles de desposeídos por la violencia y la máquina de la historia. El filme llega a cartelera el 13 de octubre.
Escuche aquí la conversación con la directora en El Arranque Especial:
En las palabras previas a la proyección, Mora quiso reparar un olvido: le agradeció a su madre por encaminarla por el sendero del cine. Y lo hizo porque por los nervios olvidó hacerlo en la rueda de prensa posterior a recibir la Concha de Oro de San Sebastián. La historia de Los reyes del mundo se nutre y articula con una larga tradición cinematográfica que ha puesto el foco en las vidas de los jóvenes marginados. Sin duda, el relato de la antioqueña toma elementos de Los olvidados, de Luis Buñuel; de Rocco y sus hermanos, de Luchino Visconti. Y, por supuesto, de Rodrigo D. No Futuro, de Víctor Gaviria, quien estuvo entre el público de la velada.
En su segundo largometraje se percibe una madurez en el lenguaje lírico y narrativo de Mora. El relato se construye sobre metáforas visuales y sonoras que sirven para darle ritmo y sentido a una propuesta que incluye reflexiones sobre el conflicto armado, el paramilitarismo, la minería ilegal y las políticas de restitución de tierras.