Se conoce preliminarmente que la explosión no dejó víctimas mortales, pero sí varias personas heridas, las cuales estaban cerca del lugar.
Siete serían las personas lesionadas por las esquirlas de la explosión, de ellos tres son policías y cuatro son civiles.
Un video que circula en redes sociales muestra que los alrededores de la subestación quedaron destruidos.
El presidente Gustavo Petro lamentó lo ocurrido tanto en Taminango, Nariño, como en Curumaní, César, en este último municipio murió el patrullero Brayan Mojica Santos.
“Extendemos nuestra solidaridad a sus familias. A quienes eligieron el camino de la guerra por encima de la paz les seguirá cayendo todo el peso de la ley”, escribió Petro en su cuenta de X.
Entre tanto, el embajador de Colombia en Argentina y exgobernador de Nariño, Camilo Romero, calificó el ataque de “acto miserable” y aseguró que “Colombia no se dejará de quienes quieren condenarla a una violencia eterna”.
“Llenan de indignación las imágenes del atentado con carro bomba en Taminango, Nariño. Total rechazo a este acto miserable y mi abrazo de solidaridad a las familias de las víctimas. Colombia no se dejará de quienes quieren condenarla a una violencia eterna”, escribió el embajador en la misma red social.
La Defensoría del Pueblo también rechazó el ataque y recordó que estas acciones se advirtieron en la alerta temprana 008-2024 “que da cuenta de la presencia, accionar y disputa territorial de grupos armados ilegales en los municipios de la zona de cordillera nariñense, lo que pone en grave riesgo a la población civil”.