El funcionario tenía 25 años. Murió en el centro médico al que fue trasladado por la gravedad de sus heridas.
Al interior de una panadería en el municipio de Sampués (Sucre) atentaron contra el patrullero de la Policía, Diego Felipe Ruiz Rincón. El hecho se registró hacia las 5:15 de la tarde de este lunes 25 de julio. Los señalados sicarios fueron abatidos en medio de la reacción policial.
“Acaban de atentar contra otro policía, esta vez en Sampués, Sucre, recién graduado y sin recibir su primer salario”, denunció la congresista Mafe Carrascal.
Del hecho se sabe que sujetos que se movilizaban en moto ingresaron hasta el local comercial y, sin mediar palabra, dispararon contra el patrullero Ruiz. En video quedó registrado el momento en el que sus compañeros lo auxilian y lo suben a una ambulancia.
El uniformado de 25 años fue llevado hasta el hospital municipal, donde falleció por la gravedad de las heridas.
“Los policías se encontraban realizando controles a los establecimientos públicos y el sector centro del municipio. Los sicarios en moto hieren a nuestro uniformado que lamentablemente fallece. Nuestros policías reaccionan y logran herir a los delincuentes, quienes también fallecieron cuando eran trasladados al centro hospitalario”, confirmó el comandante de la Policía de Sucre, coronel Carlos Correa.
Las investigaciones preliminares de las autoridades apuntan a que los responsables de este hecho criminal fueron integrantes del Clan del Golfo, que en las últimas semanas vienen ejecutando su “plan pistola” contra miembros de la fuerza pública. “Tenemos toda la actividad investigativa frente a estos hechos y tenemos algunas capturas frente a otras situaciones”, puntualizó Correa.
En la mañana de este lunes también se registró un ataque por parte del Clan de Golfo en Belén de Bajirá –límites de Antoquia y Chocó–. En el lugar murió el soldado Stiven Maico Peñalosa de 20 años.
Desde inteligencia han afirmado que durante el plan pistola, el Clan del Golfo estaría ofreciendo hasta 20 millones de pesos por policía y militares asesinados en Antioquia.
Por su parte el Gobierno dispuso de hasta 200 millones de pesos en recompensas por información que permita dar con el paradero de los cabecillas del Clan: alias Chiquito Malo, “Siopas” o “Gonzalito”.
