El alcantarillado que atiende a cuatro veredas en Chigorodó no aguantó más lluvias y sacó la mano durante este fin de semana.
Las lluvias sin tregua colapsaron el sistema de alcantarillado y las aguas inundaron las casas y calles de las veredas Guacamaya, Candelaria, La Colorada y Tierra Santa.
El informe del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres de Chigorodó determinó que la emergencia dejó 180 familias damnificadas, con pérdidas materiales en casas y locales comerciales. No hubo víctimas mortales en el hecho.
La contingencia en dicho municipio del Urabá antioqueño se suma a la ocurrida el fin de semana en Concordia, suroeste, donde 14 familias conformadas por 40 personas quedaron a la intemperie por movimientos en masa que además dejaron sin acueducto a 700 personas.
El gobernador encargado, Juan Pablo López, manifestó que la temporada de lluvias actual podría cruzarse con la segunda ola invernal del año y poner al departamento en una situación crítica.
El Seres de Desarrollo Territorial Sostenible y quien actualmente está a cargo de la Gobernación por las vacaciones de Aníbal Gaviria, señaló que el departamento ha concentrado sus esfuerzos en la atención de las vías departamentales con más de 55.000 millones de pesos este semestre en el fortalecimiento del fondo de atención del Dagran.