Probablemente en algún momento se ha encontrado con alguien muy parecido a usted o una persona le ha dicho que conoce a alguien que podría ser su gemelo porque son ¡idénticos!. Esto es más común de lo que se imagina y hay una explicación científica.
Se trata de su doppelgänger —una palabra alemana para definir el doble de una persona—, con el que podría compartir genes idénticos.
Según un estudio liderado por el genetista español Manel Esteller, publicado por la revista Cell Reports, las similitudes faciales de las personas están asociadas con variantes genéticas compartidas.
Los autores reclutaron a dobles humanos que se han retratado por el fotógrafo François Brunelle, que desde 1999 se ha dedicado a encontrar los doppelgänger de las personas. Los descubrimientos han sido asombrosos y quedaron registrados en las memorias fotográficas.
“Los seres humanos somos muy parecidos, compartimos genes entre un 99.5% y un 99.9%. El porcentaje tan bajo que queda es lo que hace que seamos distintos que es más o menos 11 o 12 millones de personas”, explicó Lina Marcela Barrera, genetista de la Universidad de Antioquia y docente de la Facultad de Salud de Uniremington.
Por lo que, la probabilidad de que sea similar a una persona que no sea familiar suya es alta, aunque según Barrera, es posible que sí compartan ancestros similares.
Aunque los genes son un factor decisivo al momento de decir que dos personas se parecen, también hay cambios que puede haber porque los rostros se modifican por variantes como el ambiente. Pero el ADN no cambia.
Para la investigación desarrollada por Manel se usaron tres algoritmos de reconocimiento facial y muestras de saliva de 32 parejas de individuos. Analizaron su secuencia de ADN, su perfil epigenético y su composición de microbios —microbioma—, detalló el científico Manel para la Agencia Sinc.
Encontraron que tenían variaciones similares de su ADN, particularmente genes relacionados en la formación de la boca, la nariz, los ojos, la barbilla y la frente. Pero no es lo único. También puede haber rasgos similares en la altura y el peso y “se extiende a ciertos ragos del carácter y comportamiento, como el tabaquismo y la educación”, precisó Manel Esteller para Sinc.
Entre más personas de distintos genes habiten en un país y se mezclen, hay más posibilidades de que las personas se parezcan, concluyó la doctora Lina Marcela Barrera.
Por ejemplo, en Colombia hay altas posibilidades de encontrar personas parecidas porque hay distintas etnias.
“En el país hay un alto intercambio genético. Es una zona geográfica que tiene mares por los que llegaban extranjeros para mezclar sus genes con personas locales. Esto puede aumentar las posibilidades de que dos personas se parezcan entre sí”.
En los países donde no acostumbran a mezclar sus genes con personas de otras nacionalidades hay menos posibilidades de que los habitantes encuentren a sus dobles.
También influye la cantidad de personas que habitan en los países. “Entre más grande sea la población, es mayor la probabilidad de que se encuentren dos personas con similitudes genéticas”, enfatizó Lina Marcela.
El caso de los “dobles” es tan increíble —y puede ser frecuente— que hasta los famosos no se escapan de que sus fanáticos empiecen a hacer comentarios.
Estas son dos parejas de actrices y actores que han sido muy nombradas y difundidas por redes sociales por las características físicas similares que comparten entre ellos.
Hasta a un grano de maíz
La genetista Barrera explica que el ADN de todos los seres vivos es igual, porque todos tienen nucleótidos idénticos que son cuatro letras. Lo que hace diferente a los seres vivos es que las secuencias de los nucleóticos tienen un orden diferente en cada especie.
“Un dato curioso es que nosotros nos parecemos a un grano de maíz en un 80% o 90% en nuestro ADN y nos parecemos a los chimpancés en un 99%. La diferencia es muy pequeña y es porque tenemos la misma composición, las mismas bases nitrogenadas”, agregó Lina Marcela.
En los humanos el orden de estas letras cambia muy poco y por esto es que se puede encontrar personas con parecidas físicamente a usted.
Las mismas enfermedades
De pronto se pregunte, ¿podrían tener las mismas enfermedades? La genetista Lina Marcela confirmó que sí es posible que padezcan de lo mismo si la enfermedad es 100% genética y no influenciada por el ambiente.
“Si tienen un gen o una secuencia de ADN específica idéntica, los doppelgänger pueden padecer una misma enfermedad”, destacó la genetista Barrera.
El doppelgänger es real
En definitiva este término, que se ha usado en la literatura y las artes, es real. Los científicos como el genetista Manel Esteller se encargaron de comprobar que sí hay personas que tienen secuencias genéticas idénticas y que por factores de ambiente y estilos de vida pueden cambiar sus rasgos físicos.
Con esta investigación de los “dobles” se podrá contribuir en avances científicos para el diagnóstico de enfermedades genéticas y la reconstrucción de rostros a partir de material ADN desconocido, algo que sería muy útil para la medicina forense y criminalística.
Recuerde que su doble podría estar en la ciudad, o en cualquier parte del mundo. Incluso hay programas dedicados a buscar los “dobles” genéticos de las personas. Uno de ellos es Ancestry International DNA de Estados Unidos al que puede brindar información sobre su genética para ser emparentado con posibles personas que compartan sus mismas secuencias genéticas. También se entrega esta información para adelantar investigaciones genéticas y de genealogía.
Y si quedó con curiosidad salga a la calle y busque a su “doble” o recuerde a quién le han dicho que se parece. Posiblemente puede compartir secuencias genéticas idénticas con esa persona.