Colombia es una de las plazas más fuertes para las apuestas deportivas online. De hecho, un estudio de Playtech revelaba que, con corte a 2022, solo Perú estaba por delante en cuanto a movimiento de usuarios.
Ese mismo año, Betsson entró a competir por un pedazo de la torta en el mercado colombiano. Sin embargo, jugadores como Betplay y Wplay ya le llevaban ventaja; ambos rivales concentran casi el 66% de la participación.
A pesar de ello, el gerente de Betsson para Colombia, Santiago Melo, le dijo a EL COLOMBIANO que la idea es meterse rápidamente en el podio.
“Nosotros queremos comernos el mercado. Claro, sabemos que vamos a quedar lejos del primer lugar este año porque hay una diferencia en escalas de negocio, pero queremos estar en el top tres de las casas de apuestas deportivas en dos años mínimo, el negocio nos exige que en dos años ya tenemos que estar en el top 3”, comentó.
Un rival pesado
Betsson es el único proveedor de apuestas deportivas en Colombia que cotiza en la bolsa de valores. A juicio del gerente, ahí está uno de las ventajas comparativas que ellos tienen; especialmente en política de transparencia.
Como todavía hay cierto recelo por la presencia de estas empresas en el fútbol, Melo sostuvo que su operación tiene que ser precisa de cara a quienes invierten en la compañía.
“La estructura de transparencia que yo debo tener es más sólida porque ya hay accionistas que están queriendo invertir en Betsson y van a observar lo que yo estoy haciendo con mucho detalle”, detalló.
El tema llegó a la conversación porque recientemente esta empresa se convirtió en patrocinadora de Atlético Nacional; equipo que no pasa por un buen momento competitivo, pero su historia llamó la atención de esta organización.
El acercamiento con los verdolagas, según Melo, “inicia tras el éxito de la alianza con Boca Juniors” y el objetivo es que “todas las alianzas toquen al público en general de América Latina”.
“Entonces —añadió— comenzamos a buscar al equipo que en Colombia nos podía conectar con todo eso” y mencionó que Nacional encajó en la estrategia. Aunque hay un leve sinsabor porque todavía no han podido inaugurar la alianza con la fanaticada en el Atanasio: los seguidores están suspendidos por mal comportamiento y la fiesta tiene que esperar hasta el próximo 11 de febrero.
Un mercado dinámico
El hecho de estampar su logo en la camiseta del verde es una señal del músculo financiero que posee Betsson y hace sentir que, efectivamente, tiene con qué meterse entre los tres primeros jugadores del segmento.
Según Coljuegos, en el país hay cerca de 18 casas enfocadas en las apuestas deportivas y el camino se va haciendo angosto, no caben todos y probablemente varios irán saliendo.
“El mercado colombiano lleva bastantes años en crecimiento, hoy está entrando en consolidación y eso exige unos esfuerzos en producto y marketing, esa es una inversión importante y no todas las casas locales han podido mantener ese nivel”, comentó Melo.
Pese a que reconoce la buena regulación que hay en Colombia, desde su óptica sí existe una asimetría que debería corregirse: no todos los proveedores tienen acceso a uno de los canales de pago más populares en el país.
“Hay unos temas que muchas veces se vuelven retadores, para mi el más retador es la falta de acceso de los operadores, específicamente al vehículo de retiros y depósitos más grande del país, eso dificulta la competencia. Ahí está la limitante que nadie ha corregido”, subrayó.
Para avanzar en medio de esa dificultad, Melo indicó que se respaldan en la creatividad de sus modalidades de juegos y en las campañas promocionales. Por ello, este 2024 el plan es invertir más en el talento humano que soporta sus plataformas, porque además Colombia será el hub desde el que atenderán al resto de América Latina.
“La cifra para desarrollo no te la puedo revelar, pero sí estamos creyendo en el crecimiento operacional. Iniciamos con menos de 20 empleados y ya estamos acercándonos a los 100 la idea es crecer mucho más si empezamos a ver la necesidad”, puntualizó.