Kairos Restaurante Bar nació en una clínica de Antioquia, cuenta Daniel Felipe Pérez, su fundador. Mientras se recuperaba de una grave enfermedad se ideó un proyecto que le diera para vivir y que le permitiera fusionar dos de sus pasiones: el cerdo y la cocina.
“Estuve dos años en la clínica y me preguntaba constantemente qué iba a hacer. Yo era campesino, tenía cerdos y trabajaba el campo, pero ya no podía volver a una finca porque las defensas de mi cuerpo ya no me daban. Así que me dio por querer montar un restaurante, pero quería que fuera distinto a los demás. Empecé a indagar e investigar y por cosas de la vida me encontré a un chef muy teso, le conté del proyecto y le gustó”, comentó Pérez.
Gastronomía de Donmatías
Kairos está ubicado en Donmatías, Norte antioqueño. Desde allí, Pérez y sus cuatro empleados trabajan para que el restaurante sea reconocido dentro y fuera de su municipio como un lugar en el que la gente puede ir a disfrutar de sus dos productos insignia: el chicharrón con melao de panela y las salsas saborizadas.
“Ese fue el plato que fue poniendo el negocio en un punto más alto. La empresa gastronómica empezó como restaurante, parrilla y bar, y luego quisimos sacar al mercado salsas BBQ y aderezos, lo que nos dio un gran impulso”.
Así, Pérez decidió salir al mercado con cuatro sabores de salsas BBQ: tomate de árbol, maracuyá, frutos rojos y tamarindo. Y según él, al sabor que más empeño le han puesto es al de tomate de árbol, ya que es una de las frutas que más se cosechan en Donmatías.
Labor social y crecimiento
Entre las proyecciones que tiene Pérez para el próximo año está aumentar a ocho personas el equipo de colaboradores del restaurante, ya que el negocio de las salsas se ha disparado en el último año. Asimismo, entre los planes a futuro del empresario está incluir la labor social en su restaurante.
“Esperamos crecer al 100 %. Las salsas son un producto que está gustando mucho, es orgánico y con estos queremos impulsar a futuro la labor social. Es decir, queremos que las personas que van a trabajar elaborando las salsas sean madres cabeza de hogar, porque a estas se les daría el tiempo para que estén en sus casas con sus hijos. Podrían llevar las bolsas de las salsas y pegar las etiquetas en sus casas, por ejemplo”, dijo el empresario.
Hacer el balance del año en cuanto a facturación ha sido difícil para Pérez, ya que afirma que “todo ha sido muy empírico”. “Desde hace dos meses para acá comenzamos a incluir la facturación electrónica, pero si vemos en términos de cómo va diciembre, creo que ha sido un mes muy bueno. En lo que va del mes hemos facturado unos $30 millones”.
La meta del empresario es fortalecer el negocio de las salsas, por lo que para los primeros cuatro meses del próximo año el objetivo es vender alrededor de cuatro toneladas de este producto, cuyo valor por kilo es de $18.000.
Pérez planea ir incrementando de manera progresiva las ventas de las salsas para llegar a comercializar hasta siete toneladas. “En diciembre de 2022 debemos estar vendiendo, como mínimo, cuatro toneladas semanales. Sé que lo puedo lograr porque tengo aliados en diferentes municipios de Antioquia que están interesados en vender en sus establecimientos las salsas que producimos aquí”