Luego de un triste comienzo año, en el que los artesanos tuvieron que interrumpir la tradición del Sanalejo el primer sábado de cada mes, este 3 de febrero por fin vuelve el color, la belleza y el encanto del tradicional mercado en el Parque de Bolívar para el disfrute de cientos de personas para quienes este sigue siendo un plan sagrado cada mes.
La Alcaldía de Medellín confirmó que este sábado más de 300 artesanos y emprendedores volverán a engalanar el parque desde las 7:00 a.m. y hasta las 6:00 p.m. acompañados por una jornada cultural y artística con la cual el Distrito quiere celebrar la primera jornada de Sanalejo de este 2024.
Y es que los artesanos señalan que es necesario conjurar el mal sabor que les quedó luego de que, por primera vez en la historia, no pudieran instalar sus toldos el primer sábado del mes, tal como ocurrió el pasado 6 de enero, todo esto a causa del desorden y el desmadre que dejó la alcaldía pasada, la cual no dejó ni el presupuesto mínimo para adelantar la actividad. “Es la primera vez en la historia que pasa esto, que comencemos el año sin Sanalejo; todo por la mala administración que salió”, lamentó en su momento el representante de la Mesa de Artesanos, Elkin Usquiano.
De manera que uno de los primeros compromisos que suscribió el secretario de Cultura Manuel Córdoba fue garantizar la reanudación de esta tradición, una de las más importantes que se mantienen vivas en la ciudad, y empezar a recuperar la confianza con el sector artístico que quedó seriamente fragmentada por la gestión de Álvaro Narváez, marcada por escándalos, denuncias e irregularidades de todo tipo.
El mercado de Sanalejo cumplió 51 años en 2023 tras nacer de la manera más espontánea con costumbres del pueblo y la gente del común. Hace medio siglo, en diciembre, vendedores de variedades, de tradicionales chuzos de carne, de pitos de niños perdidos, de aguardiente antioqueño y de toda clase de mercancías se encontraban como parte de un ritual y de un espacio integrador que además aportaba ingresos a las familias de las periferias de la ciudad.
Con el paso de los años, el parque de Bolívar se convirtió en lugar de culto para las salidas familiares los sábados que era aprovechado además para entrar a los juegos infantiles de Villanueva, ubicados para ese entonces en el segundo piso de este recién inaugurado centro comercial. Con los años el sector también se convirtió en sitio de visita obligada por los turistas. Todo esto ha garantizado que la tradición de los artesanos apostados con sus mercancías los primeros sábados de cada mes se mantenga firme.
Así que ya sabe, si estaba buscando plan para este fin de semana, nada mejor que un paseo por el Centro, la casa de todos, para comprar artesanías o simplemente dejarse antojar.
