Al principio todos se disfrutaron este alimento producido con intestino y sangre animal, mezclado con arroz, pero cuando Luis Carlos Ramírez Villegas, de 77 años, se comió uno de los pedazos, de un momento a otro comenzó a toser.
Al ver que no podía devolver este alimento, los familiares corrieron y le comenzaron a aplicar diversas maniobras para intentar que su cuerpo desatrancara este pedazo de morcilla, pero no tuvieron éxito.
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En un carro particular de los familiares lo llevaron de inmediato a la Clínica León XIII para que intentaran salvarle la vida. Allí le aplicaron maniobras de reanimación, ya que ingresó inconsciente.
Sin embargo, estas labores no fueron exitosas y falleció en las urgencias de este centro asistencial, puesto que este pedazo de morcilla le habría afectado sus vías respiratorias.
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De acuerdo con el reporte policial del caso, este inconveniente se habría generado porque Luis Carlos tenía una prótesis dental que le habría impedido masticar adecuadamente el pedazo de morcilla que le dieron en la reunión.
Esta morcilla la había preparado el cuñado de uno de sus hermanos y recurrentemente los familiares solían reunirse para departir en torno a este alimento.
Algunos expertos señalaron al respecto que para evitar atragantamientos con la comida la principal clave es masticarlos bien y despacio, tomando bocados muy pequeños en caso de tener alguna dificultad para hacerlo.
Ya si la persona tiene problemas para tragar los alimentos, la principal recomendación pasa por triturar los alimentos sólidos y contar con dispositivos para atender estas emergencias.