Durante la reciente cumbre entre el presidente ruso Vladímir Putin y el líder norcoreano Kim Jong Un en Pyongyang, Corea del Norte, donde ambos firmaron un acuerdo de defensa, la estrecha relación diplomática de los líderes también se evidenció por su intercambio de lujosos regalos, la cual marcó la primera visita de Putin al hermético país comunista asiático después de más de dos décadas.
Putin fue recibido en el país con una gran celebración, con las calles decoradas con gigantes retratos del presidente ruso, así como de su anfitrión Kim Jong Un.
El mandatario de Rusia se vio envuelto en una gran pompa en la plaza Kim Il Sung de Pyongyang con una banda militar y un espectáculo de danza sincronizada, muy habitual en las ceremonias en Corea del Norte.
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Posteriormente, el líder norcoreano le obsequió al presidente ruso un par de perros Pungsan, originarios de Corea del Norte. En un ambiente lejos de las formalidades políticas, ambos mostraron su gusto por los animales mientras el líder norcoreano alimentó con zanahorias a uno de sus caballos.
En respuesta, Putin le obsequió a Kim Jong Un una lujosa limusina alta gama de fabricación rusa, Aurus Senat. Este vehículo, usado oficialmente en el Kremlin, es el segundo que recibe el líder norcoreano por parte de Putin, pues a principios de este año le había obsequiado el primer Aurus.
Jong Un es conocido por su afición a los vehículos de lujo extranjeros, así lo evidencia su gran colección.
Incluso los líderes aprovecharon para mostrar el refuerzo de sus lazos diplomáticos y como “mejores amigos” salieron a dar un paseo en el lujoso auto por el jardín del Palacio de Invitados de Kumsusan, lugar donde el jefe de Estado ruso se hospedó.
Agencias de noticias rusas de Corea del Norte reportaron que Kim Jong Un calificó a Putin de “mejor amigo” de Corea del Norte.
Ninguno de los dos cedió el volante y ambos se turnaron para conducir el automóvil. El encuentro quedó registrado gracias a una pequeña cámara colocada en el interior de la limusina y allí se evidenció a Putin y Jong Un conversando entre risas.
Además, según declaraciones de Yuri Ushakov, asesor principal de Putin, a la agencia de noticias rusa TASS, Putin también trajo consigo otros regalos, incluyendo “una daga de almirante y un juego de té”. Por su parte, Kim le mostró su agradecimiento regalándole varias obras de arte y un busto del mismo Putin.
El acuerdo de defensa con Corea del Norte
Los dos países, unidos contra la “hegemonía” estadounidense, cerraron una “asociación estratégica global” que prevé asistencia mutua “en caso de agresión” y un posible fortalecimiento de la “cooperación técnico-militar”, según Putin.
Kim expresó a Putin su “apoyo” en la guerra en Ucrania durante la firma de acuerdo bilateral de defensa. Putin reiteró que “Rusia y Corea llevan a cabo una política exterior independiente, y no aceptan el lenguaje del chantaje”, y Kim celebró una “nueva era” de las relaciones bilaterales.
“Corea del Norte expresa su pleno apoyo y solidaridad al gobierno” en su ofensiva en Ucrania, que implicó una andanada de sanciones contra Moscú, incidió el líder nocoreano.
Putin agradeció a Kim el apoyo “constante e inquebrantable” de Corea del Norte, lo invitó a visitar Moscú y defendió que las sanciones contra Pyongyang sean “revisadas”.
Moscú y Pyongyang son aliados desde el final de la Guerra de Corea (1950-1953) y han estrechado sus relaciones desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022.
Este es el segundo encuentro de los dirigentes en menos de un año, después de que Kim visitara Rusia en septiembre.
Con información de AFP*
