Daniel Sancho –el confeso asesino del médico colombiano Edwin Arrieta– compareció este viernes por primera vez en la audiencia, que pretende juzgarlo por los delitos de homicidio intencionado y ocultamiento de pruebas, sin abogados.
La audiencia era de carácter rutinario y en ella el tribunal de Samui (Tailandia) debía extenderle al reo el régimen de prisión provisional. Lo curioso de esta cita, que fue virtual, es que el señalado asesino acudió sin la compañía de un abogado.
Es que el español de 29 años se quedó sin defensor desde el pasado 7 de septiembre. Las normas de ese país exigen que en los procesos las defensas sean hechas por abogados nacidos en Asia, por eso había contratado los servicios del tailandés Hunh Anan.
Sin embargo, la familia del confeso criminal detalló que Sancho había tenido “discrepancias en la defensa” con los servicios de Anan.
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Desde España, Sancho es apoyado por el bufete de abogados Marcos García-Montes, quienes aseguraron que trabajarán para definir los argumentos y recabar las pruebas para defender al acusado.