Maaji nació de un sueño que tenían las hermanas Amalia y Manuela Sierra por tener su propio emprendimiento. Ellas comenzaron a diseñar sus propios vestidos de baño, los cortaban y los bordaban y cuando estaban listos, su puesto era en los clósets de la casa y en la oficina de su papá.
Cuando la idea de negocio creció más —y se consolidó como una empresa formal en 2006—, estos espacios se quedaron pequeños y comenzaron a expandirse. Ahora son una de las marcas antioqueñas con mayor posicionamiento en la industria a nivel internacional, con presencia en países como Estados Unidos.
“Maaji fue un sueño para nosotras desde que estábamos chiquitas y hoy en día, después de más de 20 años, seguimos juntas trabajando como socias y haciendo lo que nos gusta. Al principio solo empezamos las dos, pero ya después de tantos años somos alrededor de 350 personas trabajando por esta empresa”, cuenta Manuela Sierra.
Los vestidos de baño de Maaji siempre han estado inspirados en el verano y la esencia latinoamericana, con la intención de acercar a mujeres extranjeras de países como Estados Unidos, y otras regiones como Europa, a la calidez del trópico y su flora.
Maaji ofrece productos con diseños florales, colores que evocan emociones positivas y cálidas; pero también cuentan con diseños más sobrios. Su inspiración siempre será el verano.
Según datos entregados por la empresa, el 92 % de sus colecciones tienen doble faz y son una organización sostenible con un enfoque de inclusión para los diferentes cuerpos de las mujeres.
¿Y por qué apostarle al público extranjero? Amalia Sierra responde que cuando iniciaron, no contaban con capital para construir una empresa aquí en Antioquia —actualmente tienen diez boutiques en el país—, pero en ese entonces era difícil. “Empezamos a pensar en llevar el orgullo latino y colombiano al mundo y allí es donde decidimos enfocar nuestra marca en la mujer internacional”, dice Amalia.
Esto ha logrado ser un factor diferenciador en los diferentes países a los que han llevado sus productos porque las mujeres de otras regiones como Europa están acostumbradas a otros estilos en sus prendas: “Las mujeres allí están acostumbradas a colores más neutros y en cierta manera eso nos ha ayudado a ser diferentes en el mercado. Hemos escuchado que a nuestros clientes les encantan los colores de nuestros vestidos de baño y de los otros productos y la felicidad que les produce”, agrega Manuela.
En cada colección de Maaji hay un tema central que engloba a otras minicolecciones para que así el consumidor logre encontrar coherencia en cada uno de los diseños. La marca le apuesta al storytelling.
Antioquia vive una ola empresarial
Amalia y Manuela recuerdan que cuando iniciaron a crear una empresa aquí en el departamento había muchos obstáculos para hacerlo.
Ahora, explican que el panorama es distinto: la cantidad de colegas que están creando empresas, emprendimientos, generando empleos, buscando una mayor oferta también en el sector de la industria de la moda, ofreciendo mejores telas y calidad en la producción.
“Sé que cuando uno dice que tiene una empresa en el sector de la moda se imaginan a los creadores de esa marca, pero detrás hay un equipo de diseñadores, confeccionistas, proveedores. Nosotras solo somos la punta del iceberg. Lo que somos hoy en día es gracias al nivel y empuje de esta ciudad, de los buenos recursos y las personas que nos han acompañado”, asegura Amalia Sierra.
Maaji es un ejemplo de que los sueños sí se pueden hacer realidad con trabajo y esfuerzo. Dos niñas que soñaban con ser emprendedoras, porque aseguran que eso “lo llevan en la sangre”. Si las hermanas Sierra tuvieran que definir su marca en tres palabras, esas serían: verano, latino y positivismo.
Pero no podían dejar escapar otra y es la versatilidad de sus diseños. Los emprendedores están más activos que nunca, confiesan. En Antioquia emergen las ideas de muchos empresarios.
De los vestidos de baño a una oferta más variada
Aunque en sus inicios Maaji inició con vestidos de baño, la marca ahora tiene una mayor variedad de productos perfectos para ir a la playa como vestidos, tops, shorts, faldas, pareos, kimonos, entre otros.
La esencia son los vestidos de baño, pero la marca también ha incursionado en las pijamas y en la ropa deportiva, todos los diseños inspirados en el trópico y en América Latina.