La Selección de Corea del Sur perdió en el Pascual Guerrero ante la Selección Colombia con un marcador de 1 a 0, despidiéndose así del Mundial Femenino Sub-20. Pese al resultado, las coreanas salieron del terreno de juego con un gesto que despertó la admiración de las rivales y los espectadores.
En la ciudad de Cali se disputó este miércoles el encuentro de octavos de final entre el equipo colombiano y la escuadra coreana. Las cafeteras llegaban como primeras del grupo A y con el arco invicto, mientras que las asiáticas se ganaron el derecho de estar en esa ronda al ser una de las mejores terceras del certamen.
El encuentro estuvo parejo, pues solo hasta el minuto 64 el marcador se pudo abrir gracias a la anotación de Linda Caicedo, quien definió ante la portera tras un pase de la lateral Sinthia Cabezas.
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Ese único gol y una actuación destacada de Luisa Agudelo, quien mantuvo el cero en el arco colombiano, sirvió para que las cafeteras continuarán su camino hacia los cuartos de final, en donde esperan rival entre Países Bajos y Francia, llave que se jugará este jueves en Medellín.
Sin embargo, debido a que el equipo que pierda queda por fuera, las coreanas se despidieron con esa anotación lograda por Caicedo, por lo que se despidieron del certamen.
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Pero su despedida fue con altura, pues una vez la jueza española Marta Huerta dio el pitazo final, las coreanas se organizaron delante de la tribuna occidental del estadio y en un gesto de agradecimiento realizaron una venia ante los espectadores.
No conformes con solo agradecer al público, las jugadoras de Corea del Sur se desplazaron al banco donde estaba ubicado el equipo colombiano y tal como lo habían hecho delante del público, se ubicaron enfrente de quienes habían sido sus rivales y con otra venia le agradecieron y se despidieron.