El técnico Paulo Autuori fue presentado este jueves en el estadio Atanasio Girardot y tras la rueda de prensa, EL COLOMBIANO pudo dialogar con él sobre su proyecto en Nacional.
¿Cuáles han sido las primeras sensaciones al regresar a la ciudad?
“Muy feliz y contento de estar nuevamente en Nacional, con una expectativa de llevar a feliz término el trabajo que he empezado, el desarrollo de los jóvenes de la cantera. Seguramente sacaré provecho también de los jugadores de experiencia, que van a ser fundamentales y cruciales. Esta mezcla debe ser la precisa, pero mi trabajo abarca más como programas de desarrollo personal e individual de los jugadores. Si queremos jugar con una alta calidad necesitamos que ellos interpreten la idea, plasmarla con la eficiencia de jugar bien y la eficacia que es hacer goles. El equilibrio será fundamental”.
¿Por qué se fue en su primera etapa?
“Eso es algo entre el club y yo, pero la ética para mí es sagrada, respeto mucho a mis colegas, son rivales en la cancha, pero solo hasta ahí. Para mí lo más importante es tener coherencia entre las palabras y los actos. El fútbol es vida, no soy una persona fuera del fútbol y otra adentro, no hago cosas con los jugadores que no haría con mis hijos. Hay que tener mucha coherencia. Lo otro es que las palabras son muy sencillas, fáciles de decir pero se las lleva el viento y prefiero los hechos. La opinión es una cosa, pero la acción es la verdad”.
¿Si llega a ser campeón le dedicaría ese título al “Arriero” y a Sarmiento?
“Es una obligación, ya lo he hecho en otros clubes en los que también entré en la mitad del proceso y ganamos. Tengo una percepción clara de la labor de ellos. No respetar ni entender la importancia del trabajo que hicieron sería insensato y no me gusta. Todos deben saber la importancia que tuvieron en este proceso”.
Usted no se refiere a cambios radicales en Nacional, sino a mejorar sobre lo que se ha hecho...
“Tiene que ver con mi personalidad, entiendo la vida como armonía, puede que no esté de acuerdo con alguien, pero voy a defender hasta la muerte el derecho que tiene de hablar la otra persona. Tiene que ver con la manera en la que encaro la vida. Sería muy pretensioso pensar que, por donde he pasado y hemos logrado ganar, yo fui el responsable. No acostumbro decir ‘yo he ganado’, sí que he participado de grupos victoriosos, uno no hace nada solo. Más allá del grupo de jugadores, hay otros profesionales que dan soporte en todas las áreas. Soy un humanista y creo en la fuerza del trabajo en equipo”.
Usted dice que el técnico no es el protagonista sino los jugadores y los hinchas...
“En los días actuales se ha generado un protagonismo tremendo para los entrenadores, eso no me gusta, porque en el fenómeno fútbol las estrellas son los jugadores y los hinchas. Ellos son los que generan esa atmósfera extraordinaria. Ellos convierten el fútbol en pasión, cualquier otro que quiera ser protagonista va a malograr el espectáculo”.
¿Cómo ve la cantera verde?
“Salieron Carlos Cuesta, Andrés Reyes, Juan Cabal, Andrés Perea y otros. Nacional siempre saca buenos centrales. Entonces si necesitamos refuerzos ahí, vamos a mirar primero lo que tiene Nacional, y no solo en esa posición, sino también en otras. Eso depende del trabajo de todas las fuerzas formativas y, por ejemplo en el Paranaense, en el que estuve 4 años, el trabajo del club se proyectó a las diferentes categorías y les dio una identidad clara. Eso es fundamental”.
Los hinchas están pidiendo grandes refuerzos para la Copa Libertadores, ¿Qué se les puede decir?
“Los hinchas siempre quieren jugadores, pero también estoy seguro que los llena de orgullo cuando estos futbolistas son de la cantera y tienen la sangre del club, que tengan ansias de triunfo. Es cierto que todos los entrenadores queremos buenos jugadores, pero la pregunta es si el club está listo para hacerlo. Ya he vivido momentos de equipos que malograron todo por traer futbolistas con nombre, porque la hinchada los pide y después se afectó negativamente a la institución. A los hinchas les gusta Nacional como institución y lo que representa, y estoy seguro de que quieren un equipo, en sus diferentes categorías, que juegue buen fútbol, sea protagonista, saque resultados y gane títulos”.
¿Cómo igualar la competitividad de los brasileños sin tener su brazo económico?
“Tengo una mirada muy clara sobre la calidad del jugador colombiano, es muy buena. Pero qué se necesita para ser más competitivos, hoy en día en cualquier profesión la competencia es feroz y para poder estar a ese nivel, más allá de la calidad técnica, hay que ser fuertes mentalmente. Uno siempre puede enfrentar a un rival mejor, pero si ese rival no tiene la fortaleza mental mía, uno termina ganándole. Seguro que Brasil tiene clubes que pueden invertir mucho, y ahí es donde se debe mirar como espejo a Independiente del Valle y Paranaense, que han hecho cosas importantes a nivel internacional, pero con jóvenes. Entonces sí es posible competir, pero depende del trabajo que se desarrolle y de esa fortaleza mental”.
¿Con qué se iría tranquilo de Nacional?
“Sería muy bueno dejar títulos, porque las instituciones viven de ellos, pero eso no lo es todo, creo que un entrenador debe hacer mucho más. Hay que dejar un legado de algo que haya contribuido al crecimiento de la institución”.
¿Qué sintió cuando lo volvieron a buscar?
“Un reconocimiento enorme y en esa época no logramos títulos, tuvimos una ruptura y ahora me llaman de vuelta, quiere decir que dejé algo mucho mayor. Uno puede ganar títulos y marcharse. No trabajo para mí, jamás lo he hecho, trabajo para las instituciones, entonces debo hacer mucho más que ganar títulos”