Por john eric gómez marín
Hace 20 años el exdelantero franco-argentino David Trezeguet, con esa misma edad, saboreó la gloria levantando el trofeo de la Copa del Mundo con Francia. Qué hay detrás de este consagrado hombre que hoy, gozando de su retiro, se prepara para ser dirigente de fútbol y cumplir como embajador Fifa.
Esa última función lo trajo a Colombia, en la gira que realiza el trofeo que será entregado en Rusia-2018.
Pausado al hablar, reflexivo, lejos del estereotipo del futbolista arrogante y que cree estar por encima de los demás, David es un campeón mundial humilde. Dialogamos con él.
¿Tiene algún sueño por cumplir?
“A nivel deportivo realicé todos mis sueños. La Liga de Campeones es el único trofeo que me faltó ganar, pero lo compenso con el Mundial”.
¿A qué se dedica?
“Estoy trabajando con la Juventus y haciendo algunas cosas con Fifa, como es la de ser embajador global. Hay varios proyectos por concretar y creo mucho en poder darles espacio a los exjugadores o leyendas que han hecho una historia importante en el fútbol”.
¿Está estudiando para eso?
“Para todo debe haber cierta preparación, sobre todo si se quieren alcanzar ciertos objetivos y en cierto orden”.
¿Qué es lo que hace concretamente con la Juventus?
“Hace tres años me ocupo de la parte de la imagen del club, de lo comercial. La idea es movilizarlo en cada continente donde tiene un crecimiento muy importante”.
¿A quién admira?
“Siempre admiré a Diego Maradona, en la actualidad son Cristiano Ronaldo y Lionel Messi por lo que han mostrado a lo largo de esta última década”.
¿Cristiano o Messi?
“Lionel Messi es el jugador más importante y determinante en la actualidad. Cristiano es un prototipo más europeo, pero sin desmerecer a ninguno de los dos, ambos son únicos y han marcado una historia en el fútbol mundial”.
El día que fueron campeones del mundo Ronaldo jugó enfermo, ¿eso fue determinante para la consagración de ustedes?
“Nunca hubo esa reflexión, nosotros demostramos en la cancha que fuimos superiores a Brasil en todo sentido y teníamos la mentalidad de lograr ese objetivo que para nosotros fue determinante en la historia del fútbol francés”.
¿Cuál fue el momento más triste de su carrera, y el más feliz?
“El más triste fue el descenso con la Juve, porque teníamos como ambición ganar la Liga de Campeones. El más feliz fue cuando con 20 años gané la Copa del Mundo”.
¿Cómo le gustaría ser recordado?
“Vivo el presente y una vez que el jugador de fútbol deja su vida profesional comienza una nueva etapa completamente diferente. Pasa de un trabajo que ha hecho durante 20 años y en el cual entrenas, juegas y viajas. Después entrás en otra fase para la que debes prepararte. A mí me queda el lado humano, el respetar a la gente, además de profesionalismo y eso es lo que la gente aprecia”.
Vino a enfrentar a Nacional con Newell’s Old Boys en 2014, ¿qué recuerda de aquel encuentro?
“Para nosotros fue un partido muy difícil ante un gran club. Nos dominaron y sobre el minuto final Cardona nos hizo un gran gol. Fue un juego en el que no encontramos las soluciones justas ante un equipo que venía haciendo muy bien las cosas en ese momento”.
Un mensaje para los niños que se inician en el fútbol...
“Que mantengan la humildad, el acercamiento al aspecto social y cultural, también estar cerca de la familia. Ser ejemplares, porque serán modelos a seguir en un deporte que une pasión, amor y determinación. Los chicos serán espejos para los que vienen atrás. Hay que mejorar siempre el aspecto educativo”.
¿Cuál fue su peor día en el fútbol?
“La final de la Liga de Campeones frente al Milan”.
¿Qué es lo malo de ser futbolista?
“No tener tiempo para la familia y los seres queridos”.
¿Cómo se ve en 30 años?
“Viejo, pero espero que con ganas de hacer cosas”.
Ya dijo que Messi es mejor que Ronaldo, pero ¿es mejor que Maradona?
“En lo personal me quedó con Maradona”.
¿Cuál fue el mejor jugador con el que jugó?
“Tuve la suerte de tener al lado tres balones de oro: Pavel Nedvěd, Fabio Cannavaro y Zinedine Zidane”.
¿El mejor amigo que le dejó este deporte?
“Mauro Germán Camoranesi”.
¿El mejor técnico?
“Marcello Lippi”.
¿Cuál fue su mejor gol?
“El que marqué a Italia en la final de la Eurocopa-2000”.
¿El estadio que más lo sedujo?
“El Monumental de River Plate”.
¿El defensa que más golpes le propinó?
“Muchos, pero en particular recuerdo a Paolo Maldini”.
¿Se va a enfocar en la parte dirigencial o lo veremos como técnico?
“Por ahora estoy enfocado en prepararme y lo que más me gustaría es llegar a ser directivo algún día”.
