Esta vez a los Montes de María llegó un pelotón armado con bicicletas, ídolos y un mensaje de paz. Fabio Montenegro fue quien comandó el “ataque”, que colmó de emociones a una población aún aporreada por la violencia que soportó en años pasados.
Hace 18 días, Montenegro dio un campanazo de su buen estado competitivo al conquistar la Vuelta a Cundinamarca. Ayer su nombre resonó con más fuerza al ganar la segunda etapa de la Vuelta a Colombia, que tuvo final inédito en la población bolivarense.
El ciclista, nacido en Chocontá hace 33 años y perteneciente al elenco Mundial de Tornillos, volvió a lucir su sonrisa tras triunfar en el trayecto de 128.6 km que se inició en Cartagena. Superó a Óscar Sevilla (EPM-Tigo) quien defendió el liderato.
En la sofocante jornada que promedió 30 grados centígrados, Carlos Julián Quintero (Coldeportes) fue uno de los grandes animadores al liderar la fuga del día.
Su aventura terminó a escasos 10 km, al ser arropado por la caravana. A 3 km del final, y con un premio de cuarta categoría de por medio, Mauricio Ortega (Supergiros) lanzó otro ataque, pero fue respondido por sus perseguidores, entre ellos Sevilla y Montenegro, que con más arrestos cruzó la meta victorioso por las polvorientas calles ante un río humano que se mostró pletórico al presenciar el espectáculo ciclístico que ni el presidente Santos se quiso perder.
