En su reciente gira, Licencia para cantar, Calamaro ofrece sus éxitos, un trío de piano, contrabajo y percusiones, y grandes dosis de tango. Llega a Medellín para presentarse el próximo 19 y el 20.
¿Por qué cambia el formato de su presentación?
“Para disfrutar de una dinámica distinta, ofrecer conciertos de mayor intimidad y concentración musical”.
¿Por qué hace énfasis en el no uso de celulares?
“La fotografía compulsiva no está permitida en los teatros, es un atentado contra la concentración de los intérpretes. Una vulgar falta de respeto”.
¿A qué se debe su salida de las redes sociales?
“Me parece epidemia, como tal es una enfermedad. No necesito compartir con desconocidos lo que hago o pienso. Prefiero evitar esa necesidad”.
¿Sorprenderá con sus éxitos al público?
“Espero que sí... Tenemos un disco listo para publicar antes de fin de año. Que Dios reparta suertes”.
¿Su nuevo disco, tendrá sus sonidos roqueros?
“Seguro. El próximo es un disco de rock ... Ideológico, satánico, incorrecto”.
¿A quién le pide Licencia para Cantar?
“Es un juego de palabras. Debería recordar al agente secreto con permiso para matar personas a discreción”.
¿Qué debe tener en cuenta el público que vaya a asistir al concierto?
“Que la fotografía digital compulsiva me tiene los huevos al plato. Le pierdo el respeto a esclavos que no pueden vivir dos horas sin el teléfono”.