Una feria con identidad y propósito
Bajo la visión de Wilson Mendoza Jaramillo y María del Pilar Velásquez Penagos, organizadores del festival, el evento buscó fomentar el amor por la literatura y la cultura en los 17 municipios de la subregión, un territorio de más de 260 mil habitantes con una rica tradición agrícola, ganadera y comercial.
“Queremos que este festival sea una cita anual, un espacio en el que las comunidades puedan encontrarse con la palabra, con las historias y con la creatividad”, afirmaron los organizadores.
La importancia de este evento radica en la necesidad de fortalecer las competencias de lectura y escritura, especialmente entre los estudiantes y la población en general, pues la falta de hábitos de lectura es un desafío global, y esta iniciativa busca contrarrestarlo con propuestas dinámicas y participativas.
Un programa para todos los públicos
El festival contó con una variada programación que incluyó talleres, charlas y actividades al aire libre, es decir, más de 600 asistentes participaron en encuentros con escritores, talleres de escritura creativa, identificación de insectos, actividades de lectura infantil y conversatorios sobre historia local.
Entre los momentos más destacados, el escritor William Rouge moderó un diálogo entre Emilio Restrepo y John Saldarriaga, en el que se discutió la importancia de la literatura negra y policial. Ambos autores, con una destacada trayectoria en el género, compartieron su experiencia en la construcción de personajes y tramas, resaltando cómo la realidad puede alimentar la ficción.
Le puede interesar: “En la poesía uno se busca a sí mismo”: Melibea Garavito
Además, el abogado Gustavo Bustamante Morato propuso la creación del Centro de Historia de Carolina del Príncipe, iniciativa que recibió gran acogida entre los asistentes, reforzando la importancia de preservar la memoria histórica del municipio.
La literatura como puente de conexión
Otro de los puntos altos del festival fue la reflexión en torno al impacto de la literatura en la sociedad.
Emilio Restrepo, médico y escritor, destacó cómo su experiencia en hospitales le ha permitido abordar temáticas como la corrupción en el sector salud y los dilemas éticos en su obra El expediente monaguillo. Por su parte, John Saldarriaga habló sobre su trabajo como periodista y cómo la vida de personas en situación de calle ha inspirado sus novelas, como Los muertos que nadie llora.
El evento también tuvo un componente artístico: la presentación del grupo de danzas La Edad Dorada, de Carolina del Príncipe, demostró la riqueza cultural del municipio, reafirmando que la literatura y el arte son expresiones fundamentales de la identidad de un pueblo.
Un primer paso hacia una tradición cultural
El éxito del Primer Festival de la Lectura y la Cultura del Norte de Antioquia deja en claro que la comunidad tiene un interés creciente en la literatura y las artes, ya que con una participación activa y una programación diversa, sentó las bases para futuras ediciones que continúen enriqueciendo la vida cultural de la región.
Además, a medida que el festival se consolida, los organizadores esperan que más municipios se sumen a esta iniciativa, fomentando una comunidad lectora cada vez más sólida.
Entérese de más: En Medellín hay un outlet de libros con más de 500.000 títulos desde $5.000
Por ahora, Carolina del Príncipe ya ha demostrado que las palabras y las historias tienen un lugar especial en el corazón de sus habitantes.