Desde la aparición de la variante omicron de la covid-19, el Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud (INS) la consideraron una variante de preocupación. Días después de confirmarse los primeros casos, ómicron se convirtió en la variante dominante en el país, reemplazando a delta.
Casi cuatro meses después y con el descenso en el número de casos que han permitido, entre otras, eliminar el uso del tapabocas al aire libre, el Ministerio de Salud advirtió que no se puede bajar la guardia con un sublinaje de ómicron.
Se trata del sublinaje BA.2 que, de acuerdo con Claudia Cuéllar, directora (e) de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud, debe “seguir considerándose una variante de preocupación”.
Este sublinaje tiene en alerta a las autoridades sanitarias de varios países de Europa que han experimentado un aumento de los casos de covid-19 en las últimas semanas.
“Por eso la Organización Mundial de la Salud recomienda mantener esa vigilancia estrecha del sublinaje; como lo viene haciendo muy bien el Instituto Nacional de Salud en su vigilancia genómica, que es la parte del seguimiento de esta variante de ómicron”, dijo Cuéllar.
La funcionaria instó a las autoridades de salud pública territoriales a continuar el seguimiento específico del sublinaje BA.2, notificar secuencias y realizar análisis de los diferentes sublinajes de la variante ómicron.
Cuellar indicó que en Colombia circulan el sublinaje BA.1, mientras que del BA.2 “hay muy pocos casos”. Del tercer sublinaje, por su parte, no hay casos confirmados.
Esta semana, Hans Kluge, director regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseguró que 18 de los 53 países que conforman la región europea de la OMS como Alemania, Reino Unido, Irlanda y Holanda, presentan una subida de los casos por la mayor transmisibilidad de la variante BA.2 de ómicron, sumado al “brutal” levantamiento de las restricciones en estos.