Las reformas del Gobierno de Gustavo Petro que aún siguen con vida en el Congreso enfrentan un reto mayúsculo: estar aprobadas antes del 20 de junio para no terminar en un estrepitoso archivo. La pensional aún debe surtir otros dos debates antes de ser ley, y la laboral si quiera cumplir con su primer debate. Todo esto, en poco más de un mes. Si bien los tiempos no dejan de ser apretados, las denuncias de corrupción en el Ejecutivo implicaron –al menos esta semana– un estruendoso freno en seco.
Por cuenta de las denuncias sobre supuestas coimas a los presidentes del Congreso para el trámite de las reformas sociales del gobierno de Gustavo Petro –con dineros de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd)–, tanto la pensional como la laboral quedaron en veremos. Ninguno de los dos proyectos aparece agendado esta semana en la Comisión Séptima de la Cámara, donde la pensional deberá enfrentar su tercero de cuarto debates y la laboral su primera discusión.
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La representante antioqueña María Eugenia Lopera (liberal, pero con tendencia petrista), quien preside la Comisión, le aseguró a EL COLOMBIANO que aún se están eligiendo a los ponentes encargados de elaborar el documento para arrancar la discusión de la pensional. “Es algo propio de la mesa directiva, estamos en eso. No se puede agendar sin ponencia. Hasta que no se radique ponencia no se puede”, explicó.
A su turno, el representante petrista Alfredo Mondragón (Pacto Histórico), quien hace parte de la Comisión Séptima, se declaró a la espera de que “se definan los ponentes de Cámara y así iniciar el debate en los próximos días”.
Frente a la laboral –que ya se hundió una vez en el Congreso en 2023–, el congresista declaró que llevan varias semanas “en debate intenso” entre los equipos de ponentes: “Tenemos varios temas en discusión. Sin embargo, se avanza en un acuerdo robusto para que avance la reforma laboral. De modo que espero que la mesa directiva convoque pronto para continuar con los artículos en los cuales hemos logrado acuerdos, que conocerá el país en su momento”.
Incluso, Mondragón le aseguró a este diario que, en paralelo, el Gobierno trabaja en un acuerdo con la mayoría de actores del sistema para presentar el próximo 20 de julio otro proyecto de reforma a la salud: “Incluye a varias EPS, que han sido los más resistentes a la reforma. Ese acuerdo avanza con diversos sectores políticos del Congreso. Se está trabajando en el contenido de la propuesta para presentarla nuevamente”.
Conozca:
Pese a la visión optimista del congresista petrista, otra es la lectura dentro de la propia coalición de gobierno. La representante Martha Alfonso –de la Alianza Verde y una de las escuderas de Petro–, se limitó a responder con un tajante “no” a la pregunta de si desde la mesa directiva de la Comisión Séptima había algún tipo de explicación de por qué no se agendó esta semana la pensional ni la laboral.
Desde la oposición, el mensaje es claro: las reformas deben entrar en el congelador hasta tanto no se resuelvan los cuestionamientos por supuestos sobornos a los presidentes de Senado y Cámara –Iván Name (Alianza Verde) y Andrés Calle (Partido Liberal), respectivamente–.
“No podemos dejar avanzar reformas en el Congreso mientras no se esclarezcan todos estos hechos. No debe haber trámite está, ni las próximas semanas. No pueden avanzar ni en las plenarias, ni en las comisiones, hasta que no se conozca el fondo de esta tremenda corrupción por medio de la cual están comprando al Congreso”, advirtió el representante de oposición, Hernán Cadavid (Centro Democrático).
Incluso, los mismos empresarios sentaron su voz de protesta. Rodolfo Correa, presidente de la Asociación Colombiana de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Acopi) pidió que Gobierno y Congreso “suspendan inmediatamente el trámite de las reformas legislativas que actualmente avanzan, hasta que se aclare si es cierto o no lo que se está denunciando”.
Sin embargo, para el representante Mondragón, contrario a un mensaje de parálisis, la instrucción del Gobierno es enfrentar la corrupción interna o externa. “Tenemos el mandato popular para seguir insistiendo en las reformas sociales, así lo hizo saber de manera civilista, alegre y mayoritaria el pueblo en la marcha del 1 de mayo”, declaró el congresista a EL COLOMBIANO.
En ese sentido, la senadora María José Pizarro (Pacto Histórico) advirtió que las denuncias de corrupción en Gestión del Riesgo no son excusa para paralizar el trámite de las reformas. Si bien pidió celeridad en las investigaciones y sanciones contra los responsables, la también vicepresidenta del Senado instó a avanzar con la agenda legislativa.
“Estas denuncias no pueden ser excusa para que las reformas que se ha trazado el Gobierno en pro y por el bien del pueblo colombiano no sigan su trámite. Es más, cada día que se dilata el trámite de las reformas, hace que, de facto sean hundidas y esto solo beneficia a quienes han sido opositores, como el mismo Iván Name”, declaró Pizarro.
Lo cierto hoy es que el tiempo corre y, aunque con la reforma laboral el escenario es más optimista –que si quiera se surta su primer debate, con todo y que ha quedado relegada–, con la pensional es a otro precio. Aún restan dos debates en la Cámara antes de su aprobación y el periodo se termina en poco más de un mes. Basta decir que en sus primeros dos debates en Senado la discusión del proyecto tardó varios meses. ¿La pensional y la laboral están condenadas a enfrentar la misma suerte que la reforma a la salud?
