Aunque en Colombia es difícil imaginarlo, las cárceles tienen el objetivo de permitir la resocialización de los presos para aprender e interiorizar ciertas normas que les permitan reintegrarse a la vida civil como ciudadanos que aporten a la sociedad.
Pero la realidad del sistema carcelario muchas veces choca con este ideal, excepto en casos como el de la Cárcel y Penitenciaría de Mediana Seguridad de Acacías, Meta, en donde los privados de la libertad trabajan en 13 proyectos productivos que le dan más sentido al encierro. El objetivo también es de restauración ecológica y de protección de la fauna y flora.
Los 977 presos están distribuidos en seis campamentos diferentes, que en total miden 4.627 hectáreas, en las que desarrollan distintas actividades agrícolas y cuidando el ambiente.
Seis privados de la libertad cuidan a 137 cerdos, cuatro más se dedican a la piscicultura, con 5.068 peces a su cargo. Además, cinco de estas personas están en el área de lechería, ordeñando y cuidando a 79 animales, y otros dos se dedican al manejo de 980 gallinas.
Eso no es todo, 140 vacas están bajo el cuidado de otros dos privados de la libertad, exclusivamente para ganadería. También hay un grupo de cuatro presos que trabajan en lombricultura, con lombrices, que sirven de alimento y están en doce cubículos.
En cuanto a la siembra, hay seis hectáreas de caña cultivadas por 30 personas; 850 plantas de plátano a las que dedican su tiempo seis presos y otras cinco hectáreas están bajo encargo de 30 más. Así también, hay 115 árboles de cultivos cítricos en la colonia.
Aparte de lo anterior, hay 20 privados de la libertad que se dedican a telares y tejidos; 19 más a la carpintería y otros siete a la panadería.
Y aparte de todo esto, recientemente, 25 internos completaron la siembra de 5.000 árboles sembrados en cinco hectáreas de la zona.
Uno de los internos que hizo parte del resultado, pero también está en otros de los proyectos, Andrés, le dijo al diario El Tiempo: “Yo estoy aquí por un error que cometí, pero con el proceso de resocialización se trata de ser mejor persona, dejar los errores que cometimos en el pasado, y ser mejores ante la sociedad”.
El nacimiento de este proyecto se dio por el Convenio Marco de Cooperación 0498 de 2021, suscrito por los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Agricultura y Desarrollo Rural y Justicia y del Derecho, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) y la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC).
El Ministerio de Justicia dice que se han beneficiado 40 privados de la libertad, que van a recibir una certificación del Sena en procesos de plantación y restauración ecológica. La meta en cuanto a la siembra es plantar 11.300 árboles nativos en 12 hectáreas, antes de terminar el Gobierno actual.