Luego de la confirmación del relevo en el Ministerio de Defensa, de donde salió Guillermo Botero y la llegada de Carlos Holmes Trujillo, el presidente Iván Duque, en rueda de prensa, dio detalles de cómo se estaba enfrentando la delincuencia, el tráfico de drogas y la violencia en el país, donde reconoció que los hurtos aumentaron, pero porque “se sinceraron las cifras”.
La tarea del ministro es reducir esas tendencias. “Tenemos el compromiso y las herramientas para hacerlo”, manifestó Duque, quien señaló que su experiencia como alcalde de Cali será fundamental para las relaciones con los gobernantes locales.
Además, destacó “su capacidad, conocimiento y la capacidad de armonizar la política nacional de seguridad con la política internacional”, además, dijo que a este Ministerio “llega uno de los mejores colombianos a esta cartera”, al resaltar que valora su experiencia.
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Las primeras palabras de Trujillo apuntan a mantener la línea política en la defensa del país y destacó que “la fuerza pública seguirá contando con todo el apoyo y la confianza” del gobierno.
Manifestó que “este es el más grande honor de mi vida” y que asume este desafío con “decisión y responsabilidad” y que fortalecerá el sistema de atención y salud para brindar más y mejor salud a las fuerzas militares “y vamos a poner en marcha la ley del veterano”, que fue aprobada en la pasada legislatura.
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Respondiendo al presidente Duque, Trujillo destacó que trabajará incansablemente por el mejoramiento de la seguridad ciudadana y la convivencia, respaldando los “resultados de los 15 meses de gobierno”, los cuales calificó como positivos, “pero tenemos que mostrar más y mejores resultados”, detalló el nuevo ministro de Defensa.
Teniendo en cuenta que la próxima semana será presentada la política marco de seguridad y convivencia ciudadana para la legalidad, “que será referente para los alcaldes y gobernadores en la ejecución de sus planes de desarrollo”.
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El ministro entrante también se refirió a los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario (DIH), al señalar que “en Colombia no toleramos las violaciones a los derechos humanos ni el DIH” y que trabajará para proteger la soberanía, reforzará el pie de fuerza de la Policía para reducir las economías ilícitas.
Frente a la protección y defensa de los líderes sociales y las comunidades indígenas, detalló que esta labor “seguirá siendo prioritaria y esa prioridad se dirigirá del mismo modo en las zonas afectadas por la violencia”, como Cauca, Catatumbo o el Bajo Cauca antioqueño, por ejemplo.
Finalmente, señaló que cada vez más fortalecerá las capacidades de inteligencia y de investigación criminal del Estado colombiano. “Cada vez es más importante contar con inteligencia moderna y coordinada con organismos de lucha contra la criminalidad” y concluyó que seguirá desarrollando la diplomacia para la defensa del territorio y profundizando las alianzas con países amigos.