A lo largo de 2023, las representantes Catherine Juvinao, Katherine Miranda y Jennifer Pedraza ratificaron –a la brava y en medio de ataques cada vez más agresivos– que el pensar diferente y asumir posturas críticas y disonantes en Colombia (y en la política en general) sigue implicando pagar un precio muy alto.
Sus observaciones, análisis y advertencias alrededor de las reformas del gobierno de Gustavo Petro, más allá de generarles admiración, les costaron arremetidas desde todos los frentes. Les recordó además que, aún en tiempos del mentado “cambio”, persisten los señalamientos y embates –con un dejo de machismo–, contra quien se atreve a pensar diferente y salirse del redil.
Sin proponérselo, aún siendo de orillas políticas distintas –con todo y que Juvinao y Miranda hacen parte de la Alianza Verde, mientras que Pedraza viene de Dignidad, el movimiento de Jorge Robledo y Sergio Fajardo–, las tres terminaron conformando un bloque femenino que supo ponerle un alto a las pretensiones del Gobierno y reivindicar su independencia en favor de los intereses de las mayorías.
El país les debe el hundimiento de la controvertida reforma política del gobierno Petro en marzo pasado, a la que le colgaron todo tipo de micos y que suponía jugosos beneficios para los parlamentarios. Fueron las primeras en advertirlo y, al encontrar puntos en común, terminaron abanderando la misma causa y uniéndose para formar un bloque al que fueron sumando adeptos.
Sin embargo, fueron los reparos a la reforma a la salud lo que le dio consistencia al bloque y les permitió consolidarse ante la opinión pública como congresistas que –aun perteneciendo a la bancada de gobierno (en el caso de Miranda y Juvinao)–, supieron marcar distancia y advertir las fallas y riesgos de algunos proyectos.
Pedraza saltó a la palestra pública por cuenta de su activismo estudiantil, particularmente por su defensa de la educación pública. Por cuenta de ese trabajo, en 2022 consiguió un escaño en representación de Bogotá tras lograr 22.809 votos. Aunque se considera de izquierda, no ha dejado de formular reparos y críticas al “gobierno del cambio”. Su trabajo se centra, además de la defensa de la educación pública, en el empleo digno y la juventud.