Ya son 1.107 menores de edad víctimas de las minas antipersonal (desde 1990 a la fecha) que las guerrillas han sembrado en distintos territorios del país. El más reciente afectado fue Ferney Cifuentes Gallego, de 14 años, quien ayer, mientras se acercaba a un estanque de agua, para darle de beber a unas vacas, pisó uno de estos artefactos explosivos.
El hecho ocurrió en la vereda La Culebra de Montecristo, Bolívar. El adolescente murió al instante por las múltiples heridas que le causó el explosivo prohibido por el Derecho Internacional Humanitario. La II Brigada del Ejército responsabilizó al Frente de Guerra Nororiental del Eln por este hecho. El comandante de la Policía de Bolívar, coronel José Correa, reiteró que los responsables fueron subversivos del Eln.
Precisamente la Fuerza de Tarea Vulcano del Ejército desactivó ayer dos campos minados del Eln en Norte de Santander, el primero en el municipio de El Carmen y el segundo en El Tarra. La información oficial indica que las minas antipersonal estaban compuestas por 25 kilos de explosivos R1, un metro de mecha lenta, un cilindro y una caneca plástica.
La Campaña Colombiana contra Minas aseguró que desde que las Farc empezaron con la tregua unilateral, el 20 de diciembre, cuatro personas han caído en campos minados con el lamentable saldo de dos adultos heridos, un menor afectado y el adolescente que murió. Según Álvaro Jímenez, director de esta ong, Ferney Cifuentes es de Medellín. En total, entre civiles y uniformados, son 11.007 afectados .
