Los negociadores del Ejército de Liberación Nacional, ELN, y del Gobierno Nacional ya tienen sede para el segundo ciclo de los diálogos de paz, cuya primera ronda concluye este lunes en Caracas, Venezuela.
Según se conoció desde Caracas, los diálogos continuarán a principios de año desde México, un país gobernado por el presidente de izquierda Andrés Manuel López Obrador.
“México acepta con todo gusto y responsabilidad ser sede. Estamos analizando las fechas propuestas y las solicitudes. En los próximos días el Gobierno de México mantendrá comunicaciones con las partes”, afirmó el delegado de ese país.
Pese a que no se tiene fecha confirmada, se espera que las conversaciones se retomen cuanto antes, a mediados del mes de enero.
La noticia se conoció minutos antes de que inicie la rueda de prensa en la que ambas delegaciones darán por terminado el primer ciclo de conversaciones que se llevó a cabo en Caracas con el apoyo del gobierno de Nicolás Maduro.
Además de la cercanía de Petro con Andrés Manuel López Obrador, la sede también cuenta con el aliciente de que México ya aceptó ser país garante de las negociaciones, un rol que le permite cercanía con el proceso y que servirá para mediar entre ambas partes.
Este lunes la negociación completó tres semanas desde que se reanudó con el Gobierno Petro. Desde aquel 21 de noviembre las discusiones se han manejado con total discreción.