En desarrollo de un debate de control político en el Congreso, el recién posesionado ministro de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo, aseguró que el gobierno colombiano insistirá en que Estados Unidos les quite el requisito de visa a los connacionales para entrar a su territorio.
Según el canciller, quien aseguró que se trata de un asunto de voluntad política, “no hay ninguna razón sólida” para que se siga pidiendo visa a los ciudadanos de origen colombiano, teniendo en cuenta las estrechas relaciones entre ambos países. Para Murillo, la eliminación de la visa por parte de Estados Unidos es un asunto “de interés nacional”.
“Es un tema de voluntad política. No hay ninguna razón sólida para decir que con el nivel de relacionamiento que tenemos con Estados Unidos –que es un aliado estratégico y especial, con el que hemos avanzado en muchos sectores–, se le tenga que pedir visa a colombianos y colombianas que vayan a Estados Unidos. Seguiremos insistiendo, porque es un asunto de interés nacional, que los colombianos y colombianas no requieran visa”, declaró el funcionario.
Por otro lado, el canciller manifestó que, por instrucción del presidente Gustavo Petro, será instalada la Embajada de Colombia en Ramallah, capital de Palestina. “Estamos seguros de que cada vez más países van a reconocer a Palestina. Y esto no es nada en contra de Israel o del pueblo judío, sino que Naciones Unidas acordó –en el contexto de los acuerdos de Oslo–, que se creara una solución de dos Estados”.
Murillo, quien acudió a un debate de control político en la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes, sostuvo que en la relación entre Colombia y Estados Unidos el tema más recurrente es migración. En ese sentido, sostuvo que se ha avanzado en el desarrollo de un programa de reunificación familiar que se espera beneficie a cerca de 58.000 colombianos, sumado a un programa de visas de trabajo para 20.000 ciudadanos.
Según el canciller, es necesario trabajar en alivio migratorio para los colombianos que entraron de forma irregular a Estados Unidos: “Hay un mecanismo de salida forzosa diferida que es discrecional del presidente de los Estados Unidos, donde pudiésemos beneficiar a cerca de 350.000 colombianos y colombianas que están de manera irregular”, dijo.
Además, defendió que hay un mecanismo tripartita con los Estados Unidos que será convocado en agosto con el nuevo presidente de Panamá. “Además de migración queremos incluir el tema de conectividad a través del tema férreo y el tema de electrificación, ambas líneas en el marco de la transición energética. El mecanismo tripartita no debe de ser solamente para asuntos de migración”, declaró el canciller.
Frente a la migración en el tapón del Darién, Murillo sostuvo que “es un desafío que tenemos todos”, al tiempo que manifestó que Colombia pasó de ser un país de acogida a un país de tránsito, pero también ahora es un país de origen
“Colombia ha estado en conversación con Panamá, Venezuela, Ecuador y Brasil y es allí donde tenemos que avanzar en una respuesta a la movilidad humana y segura, tiene que hacerse en el marco de un abordaje multilateral y hemisférico”, agregó.