La Fiscalía General de la Nación investiga un caso de presunto maltrato animal ocurrido en el barrio San Luis, en la localidad Metropolitana de Barranquilla, donde un perro callejero fue atacado en dos ocasiones con agua y aceite caliente, sufriendo graves quemaduras en su cuerpo.
Los hechos, denunciados por ciudadanos y difundidos en redes sociales, generaron indignación y rechazo por parte de las autoridades locales.
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El primer ataque contra el animal se habría registrado el lunes 17 de marzo a las afueras de una panadería, donde fue rociado con agua caliente.
Días después, el jueves 20 de marzo, el perro sufrió una nueva agresión en un restaurante, donde le arrojaron aceite hirviendo, agravando sus heridas. Durante varios días, deambuló por las calles sin recibir atención médica, hasta que ciudadanos alertaron sobre su estado a las autoridades.
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El caso fue reportado recientemente a la Alcaldía de Barranquilla, lo que motivó la intervención del secretario de Gobierno Distrital, Nelson Patrón, quien rechazó lo sucedido y ordenó la activación de la ruta de atención para el animal.
“En atención a la denuncia interpuesta por la ciudadanía y difundida en redes sociales sobre el caso de Santa, es importante señalar que desde la administración distrital se rechaza rotunda y categóricamente cualquier acto violento que atente contra el bienestar y los derechos de los animales”, manifestó el funcionario en un comunicado oficial.
Asimismo, Patrón informó que se activó un protocolo de respuesta a través del programa de bienestar animal, en coordinación con la Policía Ambiental y el equipo de inspectores de policía. “Desde que tuvimos conocimiento del caso, articulamos con nuestras entidades competentes para verificar la información de la denuncia y se impongan las medidas o sanciones correspondientes”, agregó.
