A la denuncia conocida por el desuso de una flota de helicópteros rusos al servicio del Ejército colombiano, que ya cumplieron el máximo de sus horas de vuelo y necesitan mantenimiento, respondió en la mañana de este martes la Embajada de Rusia en Colombia que reveló que las aeronaves Mi-17 están varadas en la base militar de Tolemaida porque el Gobierno suspendió el contrato para su mantenimiento.
La embajada explicó que en marzo de 2022, el Ministerio de Defensa suspendió la ejecución de los contratos firmados con la compañía rusa NASC S.A. (contratada para realizar el mantenimiento de helicópteros de la familia Mi) porque tenía “preocupación por seguridad de los helicópteros que deberían ser enviados a Rusia” para su revisión, dado que por esas fechas estalló la invasión del Ejército de ese país a Ucrania.
Agregaron que, a principios de 2023, entre el Ministerio de Defensa y la NASC fueron firmados “documentos que permitían seguir con la ejecución de los contratos”. Pero en febrero de 2023, “el ministerio otra vez detuvo el cumplimiento de sus obligaciones bajo los contratos vigentes y unilateralmente suspendió su ejecución”.
Y es que de acuerdo con un informe de la revista Semana, son nueve los helicópteros Mi-17, de una flota de 20, los que están varados en Tolemaida (Nilo, Cundinamarca) porque requieren asistencia que solo puede ser dada por el gobierno ruso y esto, explicaron, se debe al tipo de contrato por el que se compraron: una figura de transacción Gobierno a Gobierno por el que solo Rusia puede hacer el mantenimiento, ya que la intervención de un tercero le podría generar millonarias demandas al Estado colombiano.
La embajada sostuvo que, durante el año pasado “ofreció al ministerio diferentes opciones que podrían permitir seguir con el mantenimiento de los helicópteros, incluyendo la reparación en territorio de Colombia y cesión del derecho de ejecución de los contratos a una compañía colombiana”; sin embargo, “según nuestro punto de vista no existen obstáculos para que Rusia cumpla los contratos de acuerdo con las condiciones previamente alcanzadas”.
“Es decir, la compañía rusa nunca manifestó la imposibilidad de cumplir sus obligaciones y, al contrario, insistía en la ejecución de los contratos”, aclararon.
Fuentes militares le contaron a Semana que, si bien estos helicópteros parecen viejos, son fundamentales para el traslado de grandes grupos de militares a terreno, ya que un MI puede movilizar hasta 24 pasajeros y llevar cargas de hasta 4.000 kilos.
La embajada rusa manifestó que, pese a que no tuvo respuesta de ministerio ni respondió a la parte rusa oficialmente a ninguna de las propuestas planteadas, “todavía estamos a disposición de la parte colombiana para garantizar el mantenimiento de los helicópteros”, cuya reparación, según las fuentes consultadas por Semana, costaría cerca de 100 millones de dólares.
Los helicópteros en tierra y el anuncio del presidente Gustavo Petro hace unos días en el que ordenó frenar la compra de armas a Israel, uno de los principales proveedores de armamento para el país, abre el camino a una crisis en las Fuerzas Militares en momentos en que las estructuras ilegales ganan espacio tanto en la zona rural como en las áreas urbanas.