Los habitantes de Cartagena del Chairá, en Caquetá, despertaron consternados por un rumor que corría por el municipio: como hacía tiempo no sucedía, su municipio amaneció lleno de letreros y pancartas de las disidencias de las Farc.
En los grandes letreros, el grupo guerrillero hacía una invitación a sus filas a toda la población, un llamado al reclutamiento para engrosar sus estructuras armadas ilegales.
“Desde 1964 hemos forjado un sendero para establecer un nuevo modelo del poder. Te invitamos a unirte a nuestras filas guerrilleras”, dicen las vallas que en la mañana de este jueves empezaron a ser retiradas por la Policía Nacional.
Pero la situación de orden público en Cartagena del Chaira va más allá de las vallas instaladas por los grupos disidentes de las Farc. La comunidad ha denunciado que estos grupos armados ilegales desde hace una semana ordenaron apagar las plantas que alimentan la telefonía celular y las torres de internet, por lo que el municipio ha estado incomunicado, y según cifras oficiales, esto ha afectado al 80% de la población rural.
El alcalde del municipio, Edilberto Molina, confirmó que las disidencias asesinaron a uno de los trabajadores del sector y en total fueron apagadas 21 antenas de comunicación.
Con la alteración del orden público, el alcalde convocó a un consejo de seguridad y en este le reportaron el homicidio del trabajador, al parecer, en el centro poblado Nápoles, quien se encontraba realizando el mantenimiento a las antenas de comunicación.
“Lo que nos informan es que grupos al margen de la ley solicitaron el pago de una extorsión para que esas antenas pudieran seguir funcionando”, expresó el mandatario local por medio de un video enviado a distintos medios de comunicación. En este material audiovisual, agregó que los más afectados son los estudiantes.
Molina pidió al gobierno nacional intervenir ante la situación de temor que viven sus habitantes.
