Este viernes se llevaron a cabo los actos simbólicos de conmemoración de los 36 años de la toma y retoma del Palacio de Justicia, un suceso trágico que manchó con sangre la historia de la cúpula judicial y del país en general.
Ocurrió el 6 de noviembre de 1985, cuando guerrilleros del M-19 ingresaron y se tomaron con violencia el Palacio de Justicia; esa misma noche, vino la retoma por parte del Ejército Nacional. El saldo fue de 101 víctimas, entre ellos 11 magistrados, guerrilleros y empleados del lugar.
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Cada año, en los actos de conmemoración, se entonan los discursos más profundos y conmovedores. Con fuerza, sus anfitriones recuerdan lo sucedido para que nunca más vuelva a ocurrir. En esta ocasión, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Gerson Chaverra, fue más allá, exigiendo no romantizar la verdad ni contaminarla con eufemismos; en cambio, pidió contarla con plena fidelidad.
“Esa verdad no puede ser romantizada, ni puede estar contaminada de eufemismos y falacias que se derivan de los pretextos para acomodar una realidad que, aunque desgarradora, debe ser contada con plena fidelidad. No puede haber reconciliación si hay ocultamiento”, dijo el magistrado en su discurso.
