Durante la visita oficial que adelante en Estados Unidos, el presidente Gustavo Petro repitió una costumbre que le ha costado múltiples críticas en Colombia: llegó tarde a un evento político y diplomático clave en el que era uno de los protagonistas.
Todo ocurrió este jueves, cuando el mandatario colombiano arribó más de una hora tarde para hacer su intervención en la Sesión Plenaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington.
De acuerdo con los registros oficiales, el evento estaba citado para las 11 de la mañana hora local (mediodía de Colombia), pero Petro tuvo retrasos en su agenda y terminó llegando pasadas las 12:12 del mediodía hora local (1:12 p.m. de Colombia).
Como es costumbre en Colombia, el mandatario arribó al evento sin dar explicación alguna por su evidente retraso de tiempo y simplemente procedió a dar su discurso previsto para que lo escucharan representantes de 34 países en el auditorio de la OEA.
Pese a este retraso, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, recibió al jefe de Estado colombiano, quien posteriormente pudo dar su discurso sin inconvenientes después de hacer esperar por más de una hora a diplomáticos de diferentes países de la región.
Aunque la Casa de Nariño no dio explicaciones sobre este nuevo episodio de impuntualidad de Petro, este es un hecho que se ha vuelto común en Colombia, donde el mandatario suele llegar a deshoras a los eventos en los que se compromete a estar presente.
Esa impuntualidad de Petro ha desatado críticas y cuestionamientos porque su tardanza para llegar a la hora a la que inicialmente se compromete la han tenido que padecer magistrados de las altas cortes, alcaldes, gobernadores, empresarios y miembros de organizaciones sociales.
Recientemente la jefe de Gabinete, Laura Sarabia, aseguró que Petro suele llegar tarde porque siempre saca tiempo para escuchar a las comunidades y su agenda tiene que moverse, sin embargo en este caso se trató de un evento en el exterior de suma importancia diplomática.